Entre los compromisos a los que México, Canadá y Estados Unidos llegaron en la X Cumbre de Líderes de América del Norte se encuentra el desarrollo e inversión conjunta de semiconductores y minerales críticos, así como un espacio para migrantes en nuestro país.
De acuerdo con la “Hoja de ruta: Entregables clave de la X Cumbre de Líderes de América del Norte”, los tres países van a “utilizar al máximo el potencial de las cadenas de suministro de minerales críticos y semiconductores a través de la adaptación de las políticas gubernamentales para aumentar la inversión, el mapeo de recursos minerales críticos y desarrollo de capacidades”.
Los semiconductores son importantes para la industria de las telecomunicaciones y automotriz; su producción ha estado concentrada en Asia, lo que generó problemas en las cadenas de producción en la pandemia, al existir escasez. Su importancia es tal que expertos señalan que el conflicto China-Taiwán se debe al control de la generación de los mismos.
La región de Norteamérica buscará profundizar en la cooperación económica, promover la inversión y reforzar la competitividad, la innovación y la resiliencia.
En el tema migratorio, se informó que el gobierno de México “diseña un espacio de servicios de empleo, asistencia y protección para personas refugiadas, en colaboración con organismos internacionales”, en el cual se ofrecerían “servicios y alternativas de protección, documentación y movilidad laboral”.
“Los Gobiernos de EE.UU. y Canadá colaborarán con el Gobierno de México y organismos internacionales para ofrecer servicios y asistencia para personas refugiadas en dicho espacio, mismo que no contempla tareas de control”, apuntó.
En cuanto al cambio climático, los mandatarios de Estados Unidos, Joe Biden; Canadá, Justin Trudeau y México, Andrés Manuel López Obrador, se comprometieron a reducir las emisiones de metano y seguir trabajando en áreas de interés trilateral, incluyendo intercambios técnicos.
También, se trabajará para acelerar la cooperación en políticas de transición energética, incluyendo la adopción de vehículos de cero emisiones y la transición hacia combustibles más limpios para el sector de transportes en América del Norte.
Asimismo, en cuanto a la salud, “Aprovechando las lecciones aprendidas tras la pandemia de Covid-19, los países norteamericanos se comprometen a promover el intercambio de experiencias y estrategias trilaterales, así como suscribir compromisos globales que puedan generar políticas públicas con acciones necesarias para proteger a nuestros países ante crisis de salud presentes y futuras.”
ARS
