En Ejército, igualdad de oportunidades; miembro de Fuerzas Especiales llama a mujeres a sumarse. Foto: EspecialMaría Mercedes Núñez Gutiérrez, capitán segundo cirujano dentista, es una de las 22 mujeres que forman parte del Cuerpo de Fuerzas Especiales del Ejército mexicano, quien destacó que en la Sedena ya hay igualdad de oportunidades, por lo que llamó a más mujeres a sumarse.
En entrevista con Ángulo 7, reconoció que su ingreso al Ejército fue un reto, toda vez que su familia no estaba de acuerdo debido a los prejuicios de que éste era un régimen para hombres, pero le demostró que es tan capaz de realizar todas las actividades como ellos.
En ese sentido, destacó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) busca la inclusión y la igualdad de condiciones en la actualidad al tiempo de recordar que, cuando se enlistó –en septiembre de 2013–, de 47 cadetes 26 eran mujeres y 21 hombres, lo cual demuestra la apertura de la institución.
Y es que, afirmó “ya no es el Ejército retrógrado que discriminaba a las mujeres o las limitaba en sus carreras”, pues ahora ya tienen acceso para todas las carreras, armas y servicios, por lo que es una buena oportunidad para seguirse preparando. Por ejemplo, ella ha podido realizar cursos de odontología en otros países, lo cual ha contribuido en su preparación profesional.
Fue en julio de 2020 cuando causó alta como parte del Cuerpo Especial y desde entonces ahí se desempeña, siempre incentivando la participación de más mujeres. Respecto a su papel dentro de éste, destacó que por el momento suman 22 mujeres integrantes, de un total de 4 mil militares distribuidos en seis batallones, es decir, solo el 0.5 por ciento, por lo que el reto ahora es seguir sumando a mujeres a las distintas áreas de la milicia.
Para ser parte de dicho cuerpo, detalló, es necesario realizar un curso de tres meses, en el cual la exigencia física es mayor, toda vez que los aspirantes se someten a estrés emocional y físico en un campamento diario con una mochila de alrededor de 20 kilos con todos los elementos indispensables para realizar operaciones, además de que debe haber “hermandad” entre compañeros para terminarlo.
Mujeres buscan más altos grados
Sobre sus aspiraciones a futuro, destacó que su meta es conseguir el más alto grado que puede alcanzar de acuerdo con su carrera, que es general brigadier, por lo que seguirá preparándose para ello.
María Mercedes es madre de una niña de casi un año de edad, por lo que ha compaginado su profesión con su maternidad; durante el día labora mientras que al salir se dedica de lleno a su pequeña “como en cualquier empleo”, además de que en dicho lapso prepara las cosas que su bebé puede necesitar mientras ella no está.
La mitad de su carrera, destacó, es la odontología, pero la otra, es la milicia, por lo que aprendió tiro, adiestramiento de armamiento y está lista para fungir como paramédico en caso de así requerirlo, destacó y recordó que, pese a que en un principio su familia se oponía a esta profesión, ahora es el orgullo de su madre.
LPR
