El regidor del PRI en Acatlán de Osorio, Marco Antonio Mejía Martínez, sus dos hijos y un empleado, fueron asesinados la tarde del domingo en una emboscada en el paraje Barranca Grande, cuando se dirigían a un jaripeo.
A las 15:00 horas se dio el lamentable hecho, cuando el integrante del cabildo viajaba a borde una camioneta Liberty, color negro, misma que fue impactada por armas de grueso calibre, dando muerte de manera instantánea a sus ocupantes.
El lugar donde perdieron la vida los cuatro se ubica entre las comunidades de San Martín Atexcal y San Nicolás Tepoxtitlan, de acuerdo a los primeros reportes.
Se sabe que Mejía Martínez, quien era el presidente de la Comisión de Grupos Vulnerables y Equidad de Género, se dirigía al jaripeo, donde se presentaría la agrupación Los Cardenales de Nuevo León en su rancho llamado La Canela.
La Fiscalía General del Estado (FGE) se apersonó con personal del Ministerio Público para el levantamiento de cadáveres e iniciar las investigaciones correspondientes.
Ante los hechos, el dirigente del PRI estatal, Néstor Camarillo Médina, condenó el hecho, por lo que exigió a las autoridades su pronto esclarecimiento, además se solidarizó con las familias de los fallecidos.
