La subadministradora del Canal de Panamá, Ilya Espino, declaró a medios internacionales que las limitaciones para el paso de buques continuarán por el periodo de un año, a menos de que en los próximos meses caigan grandes lluvias en la cuenca y se llenen los lagos.
Lo anterior es resultado de la escasez de agua que hay en el canal, provocando el estancamiento de más de 100 buques. Por ello, dentro de las medidas es la reducción de embarcaciones que atraviesan el canal a 32 diarias; además de la disminución de calado de los buques a 13.41 metros, 60 centímetros menos de lo establecido.
Las autoridades están analizando otras fuentes para obtener el recurso hídrico; así como vías alternativas para mantener el comercio global en caso de que la situación empeore.
A su vez, las autoridades indicaron que este mes el tiempo promedio de espera para tránsitos no reservados oscila entre 9 y 11 días; además de que por el conducto transita el seis por ciento del comercio marítimo mundial mientras que sus principales usuarios son Estados Unidos, China y Japón.
En recientes días, ante la problemática, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró que el proyecto del Istmo de Tehuantepec puede servir cómo una alternativa para el comercio mundial ante la sequía del canal, pues esta obra atravesará de Coatzacoalcos, Veracruz a Salina Cruz, Oaxaca. Incluso mencionó que antes de concluir su administración, convocará la segunda etapa de la ampliación de los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos.
