De acuerdo a Standard and Poor’s (S&P Global Ratings), el municipio de Puebla elevó su calificación crediticia al pasar de “mxAA” a “mxAA+” por sus finanzas sanas, por lo que mantiene una perspectiva estable para poder acceder a un financiamiento.
Se destacó por la calificadora que el proceso de actualización del valor catastral, la reintroducción del Derecho de Alumbrado Público (DAP) y otras medidas de eficiencia tributaria han incrementado la capacidad de generación de ingresos.
La capital poblana mantuvo un nivel bajo de deuda luego haber adquirido un préstamo en 2021 que ya fue liquidado: mientras que su deuda actual es un adelanto de aportaciones que solicitó al Banco Nacional de Obras y Servicios y Públicos (Banodras) por 137 millones de pesos.
El pasivo mencionado deberá ser liquidado en 2024, y equivale al 2.3 por ciento de los ingresos del municipio. Sin embargo, a pesar de no mostrar endeudamiento alto, por ley solo podrá solicitar algún tipo de préstamo o adelanto siempre y cuando pueda pagar dentro de la administración actual.
“Los sólidos superávits operativos y altas reservas de efectivo permitirían a Puebla ejecutar sus proyectos de infraestructura, por lo que espera que mantenga esta tendencia a pesar de las mayores presiones de gasto, debido a una recuperación gradual en la recaudación de ingresos propios”, observó S&P.
La calificadora proyectó que Puebla aumente su gasto de capital y lo financie a través de superávits operativos y un uso parcial de sus altas reservas de efectivo.
