En la presentación de presuntos delincuentes ante el MP hay poca efectividad.

“La seguridad pública es una función del Estado a cargo de la Federación, las entidades federativas y los Municipios, cuyos fines son salvaguardar la vida, las libertades, la integridad y el patrimonio de las personas, así como contribuir a la generación y preservación del orden público y la paz social, de conformidad con lo previsto en esta Constitución y las leyes en la materia. La seguridad pública comprende la prevención, investigación y persecución de los delitos, así como la sanción de las infracciones administrativas, en los términos de la ley, en las respectivas competencias que esta Constitución señala”, así puede leerse en una parte del artículo 21 de la Constitución del país.

Es conveniente tener presente lo anterior porque en el Censo Nacional de Seguridad Pública 2023 del Inegi, encontrarán un dato de interés para el tema de las puestas a disposición ante el Ministerio Público (MP) de los presuntos delincuentes. https://www.inegi.org.mx/programas/cnspf/2023/

En el Censo aparecen unos datos sobre la Guardia Nacional que en 2019 registró como presuntos delincuentes en las puestas a disposición ante el MP a 51,666 personas, en 2020 a 24,894, en 2021 a 15,965 y en 2022 a 5,376, esto representa un decrecimiento de 66.3 por ciento en los dos últimos años registrados.

Por supuesto que a las anteriores cifras hay que agregar lo que al respecto hacen las corporaciones locales para tener el panorama nacional, sin embargo, si vemos la efectividad policial de la corporación federal esta deja mucho que desear por las expectativas que genera el discurso oficial y sobre todo, por las demandas del pueblo sobre este tema que evidentemente no han sido cumplidas.

Si a esta situación agregamos que el número de las personas detenidas resultado de las labores de investigación de las policías ministeriales es demasiado bajo, entonces el efecto es un aumento gradual de la impunidad en la comisión de los delitos.

Ahora que en México se llevarán a cabo los procesos electorales sería conveniente saber qué opinan los candidatos, sean locales o federales, pues sus posturas permitirán saber si tienen como prioridad disminuir la impunidad en la comisión de los delitos federales y del fuero común.

En el caso en que no sea así, el escenario no se vislumbraría halagüeño, pues entonces las futuras autoridades tendrán que seguir empleando al ejército y a la armada para apoyar la función del Estado en la seguridad pública.

El filósofo romano Lucio Anneo Séneca expresó: “En tres tiempos se divide la vida: en presente, pasado y futuro. De éstos, el presente es brevísimo; el futuro, dudoso; el pasado, cierto”.

*Las opiniones expresadas en esta sección son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente la línea editorial del portal de noticias Ángulo 7.

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Sociólogo y Maestro en Administración Pública. Ha laborado en el gobierno federal y en gobiernos locales en áreas de gobierno y seguridad. Ha sido profesor en la Universidad de las Américas y del...