Es interesante saber que la medicina hoy como siempre conforma un negocio muy lucrativo en el mundo y México no es la excepción.
Pues bien, es importante conocer cómo funciona la competencia o complemento para la salud de las farmacias con consultorios adyacentes.
Antes de entrar de lleno al tema antes citado, le comento que, mientras en el sector público, caso preciso en el IMSS de puebla no haya algunos servicios como el de endoscopia y ni idea tienen parta cuando habrá, los preparativos se hacen para incorporar a más pacientes a las clínicas y hospitales de este instituto, pero esto lo detallaré con números en otra entrega.
Retomando el tema le digo que, aunque el año pasado Hugo López-Gatell Ramírez, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, afirmó que los consultorios de farmacias ‘son un gran engaño’ y ponen en riesgo la vida, y afirmó que no es posible ‘cancelar de tajo’ los consultorios de farmacia, pero lo deseable es que ‘no existan’.
Sin embargo, a la fecha en México hay 18 mil consultorios adyacentes a farmacias, cuando en 2013 eran 13 mil, y a pesar de los riesgos satisfacen necesidades de servicios que no cubre el sistema público de salud.
Algo de Números
Durante los últimos diez años el número de consultorios adyacentes a farmacias (CAF) se encuentra así:
- Pasó de 13 mil a 18 mil, un alza de 38 por ciento.
- Estos espacios dan 10 millones de consultas al mes.
Es importante señalar que a esos consultorios de farmacias recurren – incluso- personas con derechohabiencia que desconfían del sistema público.
En Puebla
En Puebla operan más de 4 mil consultorios médicos aledaños a farmacias de cadenas nacionales privadas o de empresarios locales, según datos del año pasado del sector salud.
Aclaración de Anafarmex
Hay quienes señalan que hay dos omisiones gubernamentales: la falta de reconocimiento del papel de estos consultorios en la atención a la salud, y por otro lado, la ausencia de regulaciones claras en torno a la calidad de los servicios.
Sobre esto platiqué con un buen amigo, el presidente de la Asociación Nacional de Farmacias de México Anafarmex, Antonio Pascual Feria.
Toño me clara que ya hay un protocolo para consultorios anexos (CAF) y señala que los servicios de consultorios adyacentes a farmacias deben observar los marcos regulatorios asentados principalmente en la Ley General de Salud y las Normas Oficiales Mexicanas 005 y 004. Deben cumplir 10 requisitos fundamentales:
– Aviso de funcionamiento
– Cédula profesional de los médicos
– Infraestructura reglamentaria
– Generar expedientes clínicos
– Asumir la ética médica profesional,
– Dar información clara al paciente sobre el efecto terapéutico de los fármacos preescritos
– No condicionarle al surtimiento exclusivo en la farmacia aledaña
– Informarle su derecho de consultar otra opinión
– Hacerle saber su derecho de confidencialidad
– Adaptar la mejora regulatoria
Datos sobre la atención de pacientes:
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut2022)
– Del 48.8 por ciento de la población que recurrió a servicios privados, 22.4 por ciento acudió a un consultorio en domicilio del médico.
– 17.7 % uno adyacente a farmacia
– 3.3 % alguno en hospital
– 1.6 % a una torre médica
– 1.1% a urgencias u hospitalización privados
– 2.7% a otros servicios privados.
La preferencia por los CAF se da entre personas con y sin derechohabiencia, lo que implica que, en general, el 36 por ciento de la población se atendió en ellos y que 48 por ciento lo hizo en unidades privadas.
Como podemos ver es mucha la demanda la que tienen esos consultorios en farmacias, por lo que son un apoyo para la población en materia de salud, y la gente que acude a éstos sí encuentra los medicamentos que le son prescritos, cuando no es el caso en clínicas del sector salud en México, llámese Issste e IMSS, por eso los consultorios de farmacias son utilizados por personas de distintos niveles socioeconómicos.
Conflicto de intereses
Lo que se puede advertir también en este tema de farmacias con consultorios es un conflicto de intereses, entre el sector salud y el empresarial, y como siempre lo más penoso es que la autoridad, lejos de hacer lo conducente no solo para mejorar el funcionamiento de los farmacéuticos y sus consultorios hace caso omiso, a sabiendas que ese sector es un gran apoyo, en salud para la población.
Esperemos que no se denigré por ser negocios particulares y si el sector público no ve bien estos negocios, que mejore al cien por ciento abasto y servicios en el sector público, no con ocurrencias sino con una infraestructura sólida y un abasto real y efectivo de medicamentos.
¿No cree usted?
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