Un golpe timón cimbró al Poder Judicial la tarde del jueves, Carlos Palafox Galeana, renunció a la presidencia del Consejo de la Judicatura y Margarita Gayosso Ponce, a la del Tribunal Superior de Justicia, un día antes del quinto informe de gobierno del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Tras la muerte del ex gobernador, Miguel Barbosa Huerta, se vivió una lucha poderes entre ambos presidentes, era la primera vez que el Consejo de la Judicatura y del Tribunal Superior de Justicia no recaían en la misma persona.
El gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina se reunió con ellos en los primeros días de su gestión, posteriormente con magistrados, nada detuvo las pugnas.
El descredito del Poder Judicial arreció con el fuego que salió desde la “mañanera” del Presidente Andrés Manuel López Obrador y a nivel local el Fiscal General del estado, Gilberto Higuera Bernal, no perdió oportunidad para exhibir decisiones irregulares de los jueces.
Sumando a que el presidente López Obrador en diversas ocasiones ha propuesto que los magistrados sean elegidos por el pueblo.
En otros estados se han hecho cambios en fechas recientes en los tribunales de justicia, en algunos casos más radicales como en Oaxaca que destituyeron a todos los magistrados y se encuentran en un litigio.
Históricamente el Poder Judicial ha vivido una lucha de poderes y ahora conviven magistrados que llegaron de la mano de Melquiades Morales, Mario Marín, Rafael Moreno Valle y Luis Miguel Barbosa y que mantendrán las pugnas.
Los cambios que vimos ayer en el Poder Judicial pueden ser la punta del Iceberg.
