Editorial Ángulo 7
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En tres años al frente de Semarnat, la gestión de María Luisa Albores González ha tomado como causas el combate al cultivo de maíz transgénico y la protección de los granos nativos así como la prohibición del “fracking” para la extracción de hidrocarburos y las minas a cielo abierto, lo cual no ha dejado de ser reconocido por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

De hecho, el miércoles pasado, en la conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional, la funcionaria, quien tiene amplia trayectoria como impulsara de proyectos cooperativistas en Puebla, estuvo presente y el mandatario volteaba a verla cada vez que trataba los temas de maíz, minería y reservas naturales.

Cuando Ángulo 7 preguntó sobre los casos de concesiones mineras usadas sólo para especulación financiera, que, según datos de Carto Crítica, ascenderían al 82 por ciento de las concedidas en sexenios pasados, López Obrador dirigió la mirada a Albores González y reiteró que su gobierno mantiene la política de otorgar nuevos permisos.

Asimismo, destacó -volviendo a mirar a la secretaria– que su administración también cumple el compromiso de prohibir la fractura hidráulica para la extracción de hidrocarburos y no permitir la importación de maíz transgénico, sino promover su sustitución por las variedades nativas.

En octubre pasado, Albores González comentó, en entrevista con este medio, que dichas acciones eran dos pilares de política del gobierno federal, ejecutada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para proteger el medio ambiente y procurar la alimentación sana de la población.

También en diversos foros, la secretaria ha sostenido que el uso de transgénicos es una “falsa salida” para la seguridad alimentaria y enfatizó sobre los efectos nocivos para la salud a causa de la presencia de maíz genéticamente modificado en tortillas y otros alimentos derivados.

Hay que remarcar que esta cruzada contra el maíz transgénico tiene su resultado más palpable en el decreto presidencial del pasado 13 de febrero, que mantiene la orden de revocar y no otorgar autorizaciones para el uso de maíz transgénico en la elaboración de alimentos para humanos, como tortillas y masa.

Mineras, sin nuevas concesiones y devuelven tierras

En cuanto a la minería, López Obrador enfatizó que su gobierno no ha otorgado ni otorgará nuevas concesiones de exploración o exploración.

“Y lo que sí les puedo comentar —y aquí está María Luisa Albores— que no hemos entregado ninguna concesión desde que estamos”, aseveró el presidente.

Sólo en el caso de la mina El Boleo, en Baja California Sur, –aclaró–, el gobierno hizo una consulta popular y determinó ampliar la concesión para permitir el cierre del yacimiento y así evitar dejar sin empleo a los trabajadores.

En este punto, Albores González aclaró que mil 358 familias tienen su sustento en la actividad minera de esa zona.

Y en el caso de las mineras que no ocupaban sus concesiones realmente para exploración o explotación de yacimientos, sino para especular en el mercado financiero, López Obrador destacó que las mismas empresas las devuelven, pues ahora sí se les obliga a pagar impuestos. Así, el gobierno ha recuperado “millones de hectáreas”.

Creación de reservas, una de sus tareas

López Obrador también destacó que una de las tareas de Albores Jiménez es que, al finalizar el sexenio, se hayan creado reservas naturales “como no se hizo desde la época del general Cárdenas”.

“O sea, vamos a dejar millones de hectáreas de reservas naturales, porque es el cuidado de la naturaleza, es el cuidado de la vida, pero es el futuro”, aseguró el presidente, una vez más mirando hacia Albores, quien asintió con la cabeza.

Entre estas reservas, sin duda destaca la de Parque Ecológico de Texcoco, que se ubicará en los terrenos donde iba a construirse en NAIM, por lo que tendrá una superficie de 14 mil hectáreas, donde se procurará la recuperación de especies y mejorar la salud de la cuenca del Valle de México.

Y es que el mandatario insistió en su postura de que el turismo y las inversiones extranjeras, que han aumentado año con año en su gobierno, son bienvenidos en México porque generan desarrollo siempre cuando respeten el medio ambiente y no generen conflictos con las comunidades.

Así pues, López Obrador resaltó y mostró el trabajo de Albores Gonzáles al frente de la Semarnat, cuya titularidad asumió en septiembre de 2020, y donde ha preferido seguir enfocada en la culminación de proyectos y ejecución de políticas rumbo al cierre de sexenio, incluso por encima de sus aspiraciones a la gubernatura de Puebla.

LPR

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