La hepatitis aguda infantil no se disemina con rapidez, como la Covid-19, y, aunque se desconoce la causa del nuevo brote, se trata de un padecimiento que siempre ha estado en México y se cura con buen cuidado en la mayoría de los casos.
Así lo explicó Víctor Manuel Caballero, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Popular Autónoma de Puebla (Upaep), quien enfatizó en que la única diferencia de hepatitis aguda infantil es que no se ha identificado que sea causada por un virus perteneciente a los cinco tipos conocidos.(A, B, C, D y E).
La hepatitis se produce por algún tóxico, medicamento o alcohol, que llegan a inflamar el hígado de la persona. También puede ser una infección o algún virus que provoca dicha inflamación del órgano.
Si bien es una enfermedad grave que afecta el hígado de niños menores de cinco años, el académico señaló que las personas adultas deben identificar los síntomas más comunes y estar al pendiente de los menores.
¿Cuáles son los síntomas de la hepatitis?
Cuando un niño está enfermo de hepatitis, lo primero que manifiesta es fiebre, malestar en general, diarrea, vómito y una característica coloración amarilla en la parte blanca de los ojos y en la piel.
Este último síntoma se debe a que el hígado falla y no puede eliminar las sustancias que produce, como la bilis, que se acumula en el órgano y también pasa a la sangre. Esto produce un color amarillento en la piel, especialmente en la parte blanca de los ojos, que se llama “esclerótica”.
Agregó que la orina del infante sale muy oscura y el excremento es de color pálido, señal de que es probable que el niño presente un cuadro de hepatiti, lo cual queda comprobado con pruebas de sangre y ante dicha situación, es importante acudir con el médico.
Editado por Esteban AC
