Una iniciativa de reforma en el Congreso local busca que la venta irregular de alcohol sea castigada con hasta seis años de prisión en Puebla. También, una pena de un año contra las personas que consuman bebidas embriagantes en comercios clandestinos.
El coordinador de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), Eduardo Alcántara Montiel, propuso que se agregue al Código Penal estatal un Capítulo 23, titulado como Delitos Contra la Salud en su Modalidad de Venta y Consumo Ilegal de Bebidas Alcohólicas.
Se incorporaría el artículo 459 Ter, para clasificar como un delito contra la salud la venta y la distribución de bebidas alcohólicas “sin permiso o licencia de la autoridad correspondiente”.
Las personas que operen esta venta irregular, podría recibir una pena de dos a seis años de prisión, así como una multa de 200 a 500 Unidades de Medida y Actualización (UMAS), que equivale a un pago de 19 mil 244 a 48 mil 110 pesos.
Sin embargo, el panista también consideró castigar a los clientes. Y es que, en el citado artículo, propuso una sanción de seis meses a un año de prisión y de 50 a 100 UMAS, es decir, de 4 mil 811 a 9 mil 622 pesos, a “quien consuma en lugares sin permiso para la venta o enajenación de bebidas”.
También serán sancionados funcionarios que permitan
En cambio, los funcionarios públicos que permitan la operación de estos negocios o que no atiendan los reportes de venta clandestina, recibirían de dos a cinco años de prisión. Además, pagarían una multa de 100 a 200 UMAS, que va de los 9 mil 622 a 19 mil 244 pesos.
La iniciativa será turnada a la Comisión de Procuración y Administración de Justicia para su revisión.
El 4 de noviembre, jóvenes de preparatoria sufrieron de una intoxicación en el Salón Country Club, de Puebla capital. Al respecto, gobernador Miguel Barbosa Huerta dijo que las autoridades municipales no pueden ser omisas en evitar la venta irregular de alcohol.
El 14 de noviembre, el gerente municipal de Puebla, Adán Domínguez Sánchez aseguró que clausurarán cualquier negocio que no cuente con licencia de venta y consumo.
LPR
