Luego de que el edil Eduardo Rivera Pérez anunció la cancelación del programa de cinemómetros en la capital poblana, el ejecutivo estatal, Miguel Barbosa Huerta, llamó a las autoridades municipales a no ceder o sujetarse a presiones.
Aunque reconoció que la decisión final acerca de la iniciativa para reducir la velocidad de los automovilistas es competencia del Ayuntamiento, recomendó “asumir posiciones de gobierno”.
Manifestó su respaldo a la Comuna y subrayó que debe haber diálogo con todos los sectores involucrados.
Reconoció que el ejercicio del poder genera desgaste e hizo hincapié en que la estabilidad y seguridad de los municipios se construyen todos los días con respeto a los derechos humanos y a la ley.
El anuncio de la cancelación de los cinemómetros fue hecho este viernes por el alcalde Rivera Pérez, quién justificó lo anterior bajo el argumento de que se escuchó a la ciudadanía inconforme con la implementación del programa.
Y es que desde que el gobierno municipal anunció la implementación de los cinemómetros, debido a accidentes como el de una Ruta Azteca, la cual chocó contra un vehículo particular, dejando dos muertos y más de 10 heridos, ciudadanos mostraron su descontento en redes sociales y criticaron la decisión, al señalar que era una medida de recaudación y no para prevenir choques.
Dictan medida de protección a Miriam Vázquez
En cuanto al caso de Miriam Vázquez, víctima de violencia en el municipio de Huauchinango, el titular de la Procuraduría del Menor del Sistema Estatal DIF, expuso que la Fiscalía General del Estado dictó una medida de protección para las hijas y nietas de la denunciante.
Las menores de edad fueron ingresadas a un centro de asistencia social del organismo, en donde están recibiendo apoyo psicológico, médico y jurídico.
Precisó que las investigaciones del caso corren a cargo de la Fiscalía, por lo que evitó dar más detalles debido a la secrecía de las averiguaciones.
