El colectivo Opción Ciudadana Puebla pidió a la UIF investigar el manejo de los recursos asignados para la reconstrucción de inmuebles históricos en el estado, pues a 5 años lleva un avance del 66.8 por ciento y en otros estados como Morelos es mayor.
En entrevista, Ernesto García Hernández, coordinador del colectivo, comentó que dicho escrito fue presentado a finales del mes pasado ante la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), a fin de que toda la información que se tenga por este rubro “sea transparente”.
Explicó que a 5 años de las afectaciones que dejó el movimiento telúrico, no se cumple la totalidad de los inmuebles, los cuales consideró como una joya arquitectónica en la entidad, pues hay zonas, como el templo de Atzala, donde se cayó el techo donde murieron varias personas y no han iniciado trabajos.
“Solicitamos realice las investigaciones de acuerdo a los recursos económicos destinados para este fin y, una vez concluidas estas, si determinan que incurrió en alguna malversación de fondos se proceda con las denuncias ante las autoridades correspondientes de acuerdo con la facultad que tiene”, asentó.
Refirió que esto lo hacen porque se ha tenido una falta de atención a los inmuebles, además de que “tiene que ser impostergable” que se permitan más retrasos, púes Puebla está a 9 años de cumplir 500 de su fundación y no estarían bien que se llegue a dicha fecha sin tener todos los inmuebles sin atender.
INAH, a cargo de reconstrucción
Sin mencionar cuál sería la dependencia responsable para ello, dijo que a nivel federal fue designado el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el cual a su vez delega responsabilidades a su representación en la entidad, por lo que al final de cuentas todos tienen injerencia.
García Hernández detalló que, de acuerdo con la ley, la UIF tendría que responder en un plazo de 30 días hábiles si procede o no hacer la investigación que pide, aunque confió en que será positiva, porque Pablo Gómez Álvarez, titular de la misma, se ha caracterizado por combatir esta práctica.
Asimismo, adelantó que en los próximos días igual presentará solicitudes de transparencia ante las instancias involucradas en la reconstrucción, con el fin de conocer cuánto es lo que se ha invertido en todos los rubros, así como qué se tiene pendientes y para cuando se prevé que se concluyan los trabajos.
“La idea también es conocer si ha habido la necesidad de ampliación del presupuesto o una reducción como parte de los programas que se tienen, pues a veces se necesitan más recursos. Entonces, es prácticamente para saber si se incurrió en algo irregular en el manejo que haya generado que no se concrete la restauración”, expuso.
Agregó que incluso hay ciudadanos que han manifestado su preocupación por la falta de atención de los inmuebles, por lo que confió en que el titular de la UIF “y la lucha social que lleva por décadas”, pueda darle cauce a su petición y “darle legitimidad” a su función.
Puebla, con avance del 66%
De acuerdo con el INAH, hasta el momento, a 5 años de los sismos de septiembre, en Guerrero se tiene un avance del 93.6 por ciento, en el Estado de México el 85 por ciento, en Hidalgo el 77 por ciento, en Tlaxcala el 75.3 por ciento, en Morelos avance del 73.7 por ciento y en Chiapas el 71 por ciento.
Mientras que en Puebla va el 64 por ciento, en Oaxaca el 35.4 por ciento, en la Ciudad de México el 30 por ciento y en Tabasco ya se concluyeron, aunque en las dos primeras entidades fue donde más monumentos se vieron dañados por los movimientos telúricos.
En julio pasado, el delegado del INAH, Manuel Villarruel Vázquez, indicó que, de los 621 inmuebles y templos afectados, ya se concluyó la intervención en 397, que corresponde al 64 por ciento, mientras que los otros 224 faltantes estarán en 2023.
Este 36 por ciento representa 224 inmuebles, los cuales están programados para este año y concluir en el 2023, para lo cual se prevé destinar alrededor de mil 200 millones de pesos.
La segunda etapa del exconvento de Cuautinchan, así como el de Santo Domingo en Izúcar de Matamoros y el de Tochimilco y el templo de Atzala, que fue en donde colapsó el techo y su afectación fue grave, son de los más prioritarios.
En lo que respecta específicamente al de Atzala es “emblemático”, por lo que se está haciendo una clase de estudios y análisis que van a concluir en un proyecto que esté concluido este año para poder iniciar los trabajos en el 2023.
