En Puebla, hace falta que las desapariciones forzadas de personas sean investigadas por la fiscalía estatal como trata de personas cuando hay indicios de ello; esto, con perspectiva de género y de manera individualizada.
Así lo señaló, en entrevista con Ángulo 7, María Luisa Núñez Barojas, fundadora del colectivo Voz de los Desaparecidos, quien advirtió que la Fiscalía General del Estado (FGE) no lleva a cabo pesquisas individuales que tomen en cuenta las particularidades de cada incidente.
“De los más de 2 mil 500 casos de víctimas de desaparición en el estado de Puebla, y de una pequeña muestra de carpetas de investigación que acompañamos en el colectivo, pues realmente ninguna se investiga por trata”, refirió este domingo en el marco de la Muestra Narrativas y Memorias de la Desaparición en México, instalada en el zócalo de la capital poblana.
La activista explicó que las investigaciones de la FGE en activo se ciñen al fenómeno de desaparición forzada en lo general.
Sin seguimiento a redes de trata
Recordó que, en 2019, se dio a conocer una red de trata de personas cuyas víctimas fueron reportadas como desaparecidas en el municipio de Tehuacán, pero no hubo seguimiento al asunto.
“Aunque sabemos que el fondo de la desaparición es trata de personas, no se le está dando ese enfoque”, señaló.
Hasta abril de 2022, Puebla aparecía entre las principales siete ciudades de destino de mujeres víctimas de trata para explotación sexual, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp).
El organismo comunicó que, de 2018 a 2022, los casos de trata de personas aumentaron un 37 por ciento, pasando de 360 a 503 incidentes en todo el país, sin embargo, agrupaciones no gubernamentales acusaron un subregistro del 80 por ciento.
LPR
