El nuevo Código de Ética de la Secretaría de la Función Pública (SFP) federal incorpora el concepto de dignidad, justicia e igualdad de género, y regula la violencia laboral, así como promueve un comportamiento ético de las personas servidoras públicas
El nuevo código fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), que puedes consultar en este link dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5642176&fecha=08/02/2022 y por primera vez establece el respeto a los derechos humanos como principio y eje fundamental del servicio público.
Además, se incorpora el concepto de igualdad de género en lugar del de equidad, redefine sus objetivos y alcance para promover un comportamiento ético de las personas servidoras públicas dentro y fuera del espacio de trabajo, y regula nuevas temáticas, como el acoso laboral, la agenda de cuidados y el uso de redes sociales.
El nuevo código también reconoce los principios para el servicio público, así como el del respeto a los derechos humanos, transparencia y eficacia. Asimismo, se define el concepto de dignidad, e incorpora los conceptos de justicia e igualdad en lugar de equidad de género, y regula la violencia laboral.
Con el fin de recuperar la confianza ciudadana, se incrementa su alcance para obligar a las personas servidoras públicas a tener un comportamiento ético tanto dentro como fuera de sus centros de trabajo.
Y es que se especificó que “las personas servidoras públicas deben ser una figura ejemplar frente a la sociedad y a sus equipos de trabajo”, para lo que deberán evitar un “comportamiento opuesto a las disposiciones que regulan la ética pública y que pueda dañar la imagen del servicio público”.
El nuevo Código de Ética incorpora las reglas de integridad que deben prevalecer en las actividades cotidianas de las personas servidoras públicas: trámites y servicios; recursos humanos; información pública; contrataciones públicas; programas gubernamentales; licencias, permisos, autorización y concesiones; administración de bienes muebles e inmuebles; control interno; procesos de evaluación, y procedimientos administrativos.
Asimismo, se incluye que los entes públicos tienen la obligación de integrar comités de ética y emitir sus códigos de conducta.
Mientras que como parte de las obligaciones de las instituciones, el código establece la necesidad de fomentar un “equilibrio entre la vida laboral y personal, comprendiendo entre ello la convivencia familiar”.
E:CB
