La Secretaría de Salud de Nuevo León reportó los primeros cuatro casos en México de hepatitis infantil aguda, enfermedad del hígado detectada por la OMS en abril y que suma 300 casos en el mundo. Los pacientes permanecen estables y en observación.
Así lo dio a conocer este jueves Alma Marroquín Escamilla, titular de la dependencia estatal, durante la rueda de prensa para actualizar información sobre la pandemia de Covid-19.
De acuerdo con la funcionaria, por el momento, las autoridades se mantienen atentas a la evolución de cuatro menores, hospitalizados en instituciones públicas y privadas, así como ante posibles nuevos casos.
Aún no hay medidas preventivas, pues no hay certeza sobre el agente que causa la inflamación del hígado, el cual podría ser un virus según algunas teorías.
¿A qué síntomas deben estar atentos los padres?
No obstante, Marroquín Escamilla llamó a los padres a estar atentos a cualquier síntoma que haga sospechar de que el niño pueda desarrollar una hepatitis, incluso si se confunden con problemas gastrointestinales.
Mencionó como síntomas de inflamación en el hígado diarrea, vómito y dolor abdominal, así como coloración amarillenta en la piel y las mucosas, llamada “ictericia”, la cual es una de las características principales de la hepatitis.
“Si nosotros estamos identificando esos signos o síntomas en nuestros hijos, tenemos que llevarlos para que un médico pueda evaluarlos y determinar si se trata o no de una hepatitis”, señaló.
La funcionaria recordó que el primer brote de la hepatitis infantil aguda se reportó a principios de abril en el Reino Unido, tras lo cual también han aparecido casos en Estados Unidos, España, Israel, Italia, Francia y Noruega.
Hasta el 10 de mayo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) tenía registro de 348 casos probables en 21 países, entre ellos, 26 niños que requirieron trasplante hepático.
LPR
