Hugo López-Gatell Ramírez, subsecretario de salud, afirmó que los consultorios adyacentes a farmacias presionan a sus médicos para vender medicamentos y promueven un uso abusivo de antibióticos, lo cual puede causar problemas de salud.
Así lo expresó el funcionario este martes durante la conferencia matutina del presidente de la república, donde se le interrogó sobre los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, Insanut 2021, acerca del Covid-19, donde la investigadora y doctora del Instituto Nacional de Salud Pública, Arantxa Colchero, llama a la población a utilizar lo menos posible estos consultorios.
Según la encuesta, el 32 por ciento de los afectados por la pandemia recurrieron a la atención médica privada, particularmente recurriendo a la ofrecida en las farmacias.
Al respecto, el subsecretario expresó: “la idea básica con la que estos consultorios empezaron a hacer fama y después a tener una clientela importante fue que tienen una resolución inmediata que aparentemente soluciona problemas de salud, porque simplemente hay que pararse en el consultorio, no se necesita hacer cita y se le atiende”.
Señaló que la premisa resulta atractiva porque este tipo de establecimientos pululan en la actualidad en las ciudades y cuentan con una amplia gama con precios accesibles.
Pero aseguró que estos no resuelven problemas serios de salud y que incluso podrían llegar a complicarse o poner en riesgo de muerte a sus pacientes.
Mantienen precariedad laboral
Indicó que las farmacias, en su gran mayoría pertenecientes a grandes corporaciones, ofrecen condiciones precarias de trabajo a sus empleados, a los médicos se les contrata eventualmente y se les presiona para recetar medicamentos que no son los indicados, convirtiéndolos en agentes de venta más que en servidores con vocación.
“Las condiciones (…) son condiciones muy precarias, hay todo un tema, incluso de justicia laboral o incluso de cumplimiento de las leyes relativas a las condiciones laborales que podrían estar siendo violadas sistemáticamente en estos consultorios adyacentes a farmacias por estas corporaciones, son contrataciones eventuales”, aseveró el funcionario.
Y agregó: “están bajo presión porque tienen que hacer recetas de múltiples medicamentos, porque ese es el interés principal, no es dar consulta, no es resolver un problema de salud”.
Finalmente, reconoció que los consultorios adjuntos a farmacias con un enfoque mercantilista no deberían existir, sin embargo, admitió que al cubrir las necesidades de la población, no pueden cancelarlos de “tajo”.
Y planteó que conforme el sistema de salud público avance y mejore, estos consultorios tendrán que regularizarse con mayor rigor.
Editado por Istfan AC
