El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que este jueves se llevará a cabo una reunión entre la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro y sus contrapartes de Estados Unidos y Canadá con respecto a la controversia energética en el T-MEC.
Durante su conferencia matutina el mandatario adelantó que este día se realizará una reunión más entre representantes de los tres países para tratar las supuestas violaciones de la política energética actual al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Aseguró que hay buena disposición por parte de todos los involucrados para llegar a una solución y que espera que la reunión tenga resultados favorables.
El pasado julio Estados Unidos y Canadá solicitaron consultas para evaluar algunas acciones del gobierno actual que presuntamente violan los capítulos dos, sobre el acceso al mercado, 14 sobre la inversión y 22 sobre las empresas propiedad del estado del T-MEC.
Según los comunicados que ambas naciones emitieron el 20 de julio, la política de López Obrador está favoreciendo las empresas nacionales y deja en desventaja a la inversión privada, lo que es contrario al acuerdo.
Reclaman específicamente la modificación a la Ley de la Industria Eléctrica que prioriza la Comisión Federal de Electricidad; la inacción, retrasos, denegaciones y revocaciones de la capacidad de las empresas privadas para operar en el sector energético de México; el aplazamiento de la obligación de suministrar diésel de ultra bajo azufre sólo para Pemex en 2019 y la estrategia referente al uso del servicio de transporte de gas que restringe las importaciones de gas natural estadounidense.
Las consultas iniciaron en el mes de agosto, con un plazo de 75 días para llegar a un acuerdo, el cual se cumplió en octubre; aunque el siguiente paso previsto por el T-MEC es establecer un panel de discusión que podría tardar hasta siete meses, los involucrados decidieron continuar las negociaciones sin recurrir a esta instancia.
El jefe del ejecutivo federal ha declarado en diferentes ocasiones que las acciones emprendidas por su gobierno no violan el acuerdo, por lo que espera que sus socios acepten un acuerdo justo sin necesidad de procesos legales o sanciones.
“Estoy seguro de que van a darse cuenta de que no se afecta en nada nuestra relación con la aplicación de nuestra política soberana en materia eléctrica, en el manejo de litio, eso no está sujeto a ningún tratado, es un asunto de principios” explicó el pasado octubre.
Editado por Mariam Rojas
