Tras la aprobación del paso de la Guardia Nacional a la Sedena, la CNDH afirmó que supervisará su actuación con apego a los derechos humanos, al tiempo de señalar que no promoverá alguna acción de inconstitucionalidad contra la reforma.
A través de un comunicado, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) destacó que “dada la situación de violencia que aqueja al país, la intervención de la Sedena puede ser y es admisible, desde el punto de vista de los derechos humanos, siempre y cuando su intervención se encuentre limitada en el tiempo y sujeta a casos de excepcionalidad”.
La Guardia Nacional debe considerarse como una herramienta del Estado, que debe seguir el marco legal, el cual “ciertamente hay que reforzar y mejorar”, señaló, además de que debe ir de la mano con instituciones y organismos para seguir protocolos que garanticen la profesionalización de sus integrantes con un enfoque en derechos humanos.
Posicionamiento institucional frente a las reformas aprobadas por el @senadomexicano respecto de la #GuardiaNacional (@GN_MEXICO_): La #CNDH no promoverá #AcciónDeInconstitucionalidad alguna.
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— CNDH en México (@CNDH) September 13, 2022
Programa en DH, propone
Por ello, la CNDH propuso el desarrollo de un programa de educación para el desempeño frente a la ciudadanía y ante el crimen organizado, así como acciones a implementar en mediano y largo plazo, como promover sistemas de inteligencia criminal, con doctrina democrática y estructuras especializadas en función de la seguridad ciudadana; incorporar contenidos de derechos humanos en sus planes de estudios; así como generar el entrenamiento y conocimiento necesario en el uso adecuado y proporcional de la fuerza.
En ese sentido, la CNDH declaró que no interpondrá ninguna acción de inconstitucionalidad contra las reformas aprobadas por el Senado el pasado 9 de septiembre y se sumará a la ejecución de éstas mediante su observación y monitoreo.
El organismo destacó que, en 2020, la Sedena era la séptima autoridad más señalada en expedientes de queja, mientras que la Guardia Nacional, la octava; mientras que, para 2021, la Guardia Nacional pasó a ser la sexta más señalada, mientras que la Sedena se quedó en su lugar.
Sin embargo, por el número de expedientes, la actuación de la Guardia Nacional “arroja menos hechos violatorios de derechos humanos que su antecesora, la Policía Federal”.
