El presidente, Andrés Manuel López Obrador, criticó la presencia de “cabilderos” de empresas extranjeras, como el italiano Paolo Salerno, que están contra la reforma eléctrica en la Cámara de Diputados; descartó aplicar el artículo 33 constitucional.
Desde Palacio Nacional, cuestionó que “de manera descarada” el supuesto representante de la firma Enel se haya metido “hasta la sede de los diputados” y se sentó en una curul, junto a Edna Díaz Acevedo, del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Señaló que dichas acciones son las fuertes presiones y “hasta cañonazos” a los que están sometidos los legisladores en torno a la votación de la iniciativa.
Aunque indicó que no tiene información sobre si algunos diputados de la oposición están recibiendo dinero para votar en contra de la reforma, recordó que para la aprobación de la energética, en 2013, sí se dio dinero a legisladores, de acuerdo con lo que declaró Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Descarta aplicar artículo 33 constitucional a cabilderos
López Obrador descartó aplicar contra los cabilderos extranjeros el artículo 33 de la Constitución, el cual plantea que el ejecutivo “previa audiencia, podrá expulsar del territorio nacional a personas extranjeras con fundamento en la ley” y prohíbe a los mismos “inmiscuirse en los asuntos políticos del país”.
Apuntó que lo realizado por Paolo Salerno, así como otros representantes de empresas extranjeras, es causal para la aplicación de dicho artículo, pero ahora México es “un país de libertades”.
