En agosto, la inflación de la energía en México fue de 8.3 por ciento, con lo que fue el tercero con la menor tasa de los países de la OCDE; sin embargo, en cuanto a los alimentos, tuvo un alza de 14.2 por ciento, ocupando el lugar 15 con el mayor incremento.
En cuanto al alza en los precios de los energéticos, nuestro país únicamente fue superado por Israel, con 7.7 por ciento y Hungría, con 4.3 por ciento, y muy por debajo del promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que fue de 30.2 por ciento.
Las naciones que tuvieron mayores incrementos fueron Turquía, Estonia, Países Bajos y Letonia, con 132.8, 98.1, 88.5 y 67.3 por ciento, respectivamente.
Sin embargo, México tuvo un incremento de la inflación de 14.2 por ciento en el rubro alimenticio, ubicándose por arriba de países como Estados Unidos con 13.5 por ciento, España con 13.8 por ciento, Reino Unido con 13.1 por ciento y por debajo de países como Alemania, que tiene una inflación del 15.7 por ciento, Portugal con 15.3 por ciento o Chile con 21.7 por ciento.
Los primeros tres países con la inflación más grande en alimentos dentro de los países de la OCDE están Turquía con 90.3 por ciento, Hungría con 33.1 por ciento y Lituania con 30.6 por ciento, mientras que los países con la inflación en alimentos más baja están Japón con 5.1 por ciento, Israel con 4.2 por ciento y Suiza con 2.5 por ciento.
Cabe mencionar que el gobierno de México ha aplicado subsidios a las gasolinas de hasta el 100 por ciento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), con lo que ha logrado contener los precios en ese rubro; no obstante, en los alimentos la inflación continúa subiendo, por lo que ha anunciado acciones en ese sentido.
Editado por: José Carlos Aguado Carmona
