En los últimos días ocurrió algo muy interesante que para muchos pasó desapercibido y más, para quienes se dedican a la clase política y sueñan con una candidatura para las elecciones de 2024.
La historia que les voy a contar ocurrió exactamente el domingo pasado en el municipio de Quecholac, donde se realizó una comida para celebrar, por adelantado, un cumpleaños.
Se trata del cumpleaños del dirigente estatal del PRI, Néstor Camarillo López, quien se codea con actores locales que podrían posicionarlo rumbo a las elecciones de 2024.
Y es que en esa celebración, llegó hasta ese municipio, el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez.
Sí, leyó bien, el alcalde Eduardo Rivera Pérez, quien ha demostrado que sería un buen aliado para que Néstor Camarillo Medina sea un candidato.
La pregunta es ¿Qué posición podría amarrar para el 2024?
Si Rivera Pérez compite por la gubernatura del estado, Nestor Camarillo Medina sería un perfil para la presidencia municipal de Puebla, bajo una alianza entre el PAN, PRI y PRD.
Y la idea para algunos priistas no suena descabellada, pues cuentan que el edil de Puebla, no quiere entregar candidaturas a lo que en su momento fue el morenovallismo en el estado.
¿Pero quiénes serían esas figuras del morenovallismo sobreviviente en Puebla?
La respuesta es sencilla, se trata del diputado federal del PAN, Mario Riestra Piña, quien apenas reconoció abiertamente su interés de competir por un cargo público en 2024.
¿Qué opinan?
Mientras son peras o son manzanas, Néstor Camarillo Medina goza con buena salud política y dependerá de su ajedrez, amarrar una posición que le permita la sobrevivencia que necesita de cara al 2024.
Hasta aquí mi reporte.
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“Si no logras desarrollar toda tu inteligencia, siempre te queda la opción de hacerte político”.
Gilbert Keith Chesterton
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