Tras tres años de investigaciones, la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el caso de Ayotzinapa determinó que la desaparición de los 43 normalistas, el 26 de septiembre de 2014, fue un crimen de Estado y que no existen indicios de que lo jóvenes estén vivos.
Así lo dio a conocer este jueves, en conferencia de prensa desde Palacio Nacional, el titular de la Comisión, Alejandro Encinas Rodríguez, también subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), quien remarcó que el caso no está cerrado, pues continúan las investigaciones contra exfuncionarios y presuntos sicarios.
“No estamos cerrando, como alguien lo ha señalado, la investigación, sino que, con toda esa investigación, continúa, continuará, hasta que encontremos toda la verdad, encontremos a los muchachos y se castigue a los responsables”, expresó el funcionario.
Enfatizó que la verdad oficial “fue una acción que ocultó la verdad de los hechos, alteró las escenas del crimen, los vínculos de autoridades con el grupo delictivo y la participación de agentes del Estado, fuerzas de seguridad y autoridades responsables de la procuración de justicia en la desaparición de los estudiantes”, aseveró.
Jóvenes, desaparecidos por 3 niveles de gobierno
Según las conclusiones del informe, en los hechos participaron elementos municipales, estatales y federales en conjunto o por omisión, con el grupo delictivo que desapareció a los normalistas.
Asimismo, se informó que hasta el momento solo se ha logrado la identificación de restos de tres jóvenes, y no hay indicio de que pudieran estar con vida ya que todas las declaraciones y testimonios apuntan a que fueron asesinados y después desaparecidos.
Además, la Fiscalía General de la República (FGR) continúa las indagatorias en contra de 33 personas involucradas en el caso Ayotzinapa, a quienes se les llevan a cabo las diligencias judiciales correspondientes.
Editado por Istfan AC
