El gobernador priista de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, llamó a los legisladores del PRI a analizar los “beneficios” de la reforma eléctrica sin intereses de grupo; en tanto, Claudia Ruiz Massieu, vicecoordinadora del partido en el Senado, rechazó la iniciativa como la plantea el Ejecutivo.
Este martes, las posturas de los priistas se dividieron respecto a la propuesta –que busca priorizar a la CFE y dar al Estado la propiedad de yacimientos de litio– luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador instó al Partido Revolucionario Institucional (PRI) a retomar el enfoque nacionalista sobre la energía y dejar a un lado la etapa “neoliberal”.
En este sentido, llamó al otrora partido oficialista a definirse entre seguir con el “salinismo”, en referencia al modelo neoliberal instaurado en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, o por “retomar el camino” de los presidentes Lázaro Cárdenas del Río y Adolfo López Mateos, quien en los sesenta nacionalizó la industria eléctrica.
Después de la conferencia matutina de López Obrador, en Veracruz, reporteros entrevistaron a Murat Hinojosa en el popular café La Parroquia, donde desayunaba con la secretaría de Energía, Rocío Nahle García, y otros funcionarios federales.
Murat pide priorizar “beneficios” de iniciativa
Ahí, Murat se pronunció a favor de que los legisladores del PRI analicen la iniciativa presidencial “en función de los beneficios técnicos para el país, y no en función de un grupo”. En este sentido, dio su visto bueno a los foros de discusión sobre la reforma eléctrica a los que convocó la bancada del PRI en la Cámara de Diputados.
Murat tendría que convencer al menos a 56 de los 71 diputados del PRI en San Lázaro de adoptar su postura, a fin de facilitar a Morena y aliados conseguir la mayoría calificada (333 votos) que requiere para aprobar la reforma, pues esta incluye cambios a la Constitución federal.
Ruiz Massieu dice no a reforma propuesta
Después, la minuta iría al Senado, donde, por el momento, Ruiz Massieu sostuvo que su bancada “no apoyaría” la reforma tal y como la propone López Obrador, pues la considera un “perjudicial” para México y un “retroceso” respecto a la aprobada en el sexenio pasado.
Por su parte, el Partido Acción Nacional (PAN), que rechaza la reforma de plano, lanzó un ultimátum al PRI, según el cual, si el partido tricolor respalda la iniciativa, “se acaba la alianza Va por México”.
Al cierre de esta edición, Alejandro Moreno Cárdenas, presidente nacional del PRI y diputado federal, encabezó una conferencia de prensa donde reiteró la disposición de su bancada a discutir la reforma, pero “sin prisas”, pues aseveró que “al PRI nadie lo presiona”.
