Tras la reapertura total de negocios, poblanos que acudieron a mercados a surtirse para armar su ofrendas desembolsaron de 400 hasta mil pesos, 20 por ciento más que en 2020, principalmente debido a que el costo de las flores se duplicó.
Esto de acuerdo con un sondeo realizado por este medio en la zona del mercado 5 de Mayo, ubicado en la calle 16 Poniente, entre 3 y 5 Norte, en donde se pudo ver poca afluencia de personas, toda vez que los días más fuertes para su venta son el 1 y 2 de noviembre, es decir, la siguiente semana.
Iván Méndez, quien vendré en el interior del inmueble, señaló que confían en que en estos días que dura la temporada puedan tener mayores ingresos, pues al darse la reapertura al 100 por ciento se está moviendo la economía “y eso es bueno”, aunque para este año se duplicó el costo de los rollos.
Dijo que la madeja de cempasúchil pasó de 35 a 70 pesos, mientras que la de alhelí subió de 25 a 50, por lo que “es mucha inversión la que se hace” con la esperanza de que no se queden los rollos como sucedió el año pasado, que por la pandemia no todos pudieron sacar su mercancía.
Detalló que una de las flores que se busca mucho es la de terciopelo, pero decidió no venderla porque un rollo está en 70 pesos y tendría que darla a 90 pesos como mínimo, por lo que no todas las compran.
Floristas buscan recuperar ventas
“Los días buenos son el 27 y 28 de octubre, se calma hoy 29 y se compone para el 30, el 1 y 2 de noviembre, es una temporada que tenemos que aprovechar, son pocos días, las cosas no están tan bien, hace un año las ventas estuvieron bajas, como del 40 o 50 por ciento, ahora confiamos en que, si se nos dé”, apuntó
Mientras que Margarita Ocotl Ocotl, que tiene un puesto afuera del mercado, dijo si se ha vendido, pero por la pandemia el costo de las flores se duplicó, pues las madejas de cempasúchil que ella trajo están de a 200 pesos, cuando el año pasado estaban en 100 pesos, situación similar que con las de terciopelo.
Por ello, comentó que optó por hacer rollos pequeños para darlos en 10 o 20 pesos para que la gente los compre, por lo que estima que al día se venda 300, sobre todo porque el 1 y 2 de noviembre la gente acude a comprar para que lleve a los panteones.
“Estamos como al 50 por ciento, hay menos flor porque muchos productores ya no sembraron por el miedo de invertir y no sacar nada, son alrededor de tres días buenos, por lo mismo de los costos la gente lleva poco, pero estamos aquí y a ver como se vende”, abundó.
Poblanos gastan entre 400 y mil por ofrendas
En el caso del gasto que los poblanos hacen para poner sus ofrendas, estos han variado, pues van de los 400 a mil pesos, lo que significa un aumento de alrededor de 100 pesos, principalmente por la flor, pues se “subió el precio” y esto ocasionó que tengan que gastar más.
María comentó que puso dos ofrendas, una para su suegra que falleció en mayo y otra a sus papás, ya que uno de ellos murió este año por Covid-19 y aunque “son chiquitas” porque no tiene mucho espacio, les puso flores, pan de sal, agua, dulce de calabaza, mandarinas, guayabas, veladoras, dulces típicos como camotes, jamoncillo y tortas de Santa Clara, además de agua, café y mole poblano.
“El rollo me costó como 70, el amarillo, compré otro que es como de margaritas que me costó 50 pesos, yo calculo que entre la fruta e ingredientes para hacer la calabaza y el mole, como 500 pesos, más o menos eso fue, pero fueron dos, es que depende del tamaño, si es más grande pues si te gastas como mil”, asentó.
Araceli, dijo que en su familia “llevan muchos años” poniendo la ofrenda y lo hacen desde los primeros días de la temporada, para que les dé tiempo tenerla lista el 28 y prender las veladoras hasta para que “lleguen sus familiares”, gestándose alrededor de 400 pesos.
Dijo que adorna todo con papel picado de varios colores en donde pone dulces de leche, calaveritas, flores, naranjas, guayabas y las flores, además de refresco, pulque, cervezas y cigarros, pues es lo que les gustaba a sus familiares.
Nos gastamos 500 por ofrenda: Juan
Para Juan, el gasto que hizo fue de los 500 a los 600 pesos, mientras que hace un año destinó alrededor de 400 y llevan poniéndola al menos 30 años para sus abuelos y otros familiares, aunque la cambian constantemente para que la fruta y pan no se ponga dura.
“Mira la verdad es que tenemos una tradición de cambiar las cosas que le ponemos casi todos los días, yo creo que, si nos gastamos como 3 mil pesos por toda la temporada, más que nada porque lo que es la comida si la tenemos que mover”, dijo.
Mientras que David comentó que se gastan entre 500 y 600, la cual está dedicada a sus abuelos maternos y paternos y amigos y ponen desde el 27 de octubre y para este año se tuvieron un incremento por que subió la flor, ya que un manojo “chiquito” les costó 20 pesos.
