Desde Tapachula, Chiapas, miles de migrantes salieron en caravana y lograron romper el cerco de autoridades federales; su objetivo es llegar a la Ciudad de México para exigir que el INM agilice sus trámites de regularización y poder transitar con libertad.
El sábado por la mañana, hombres, mujeres y niños se agruparon en la llamada “Marcha por la Paz” para salir de dicha ciudad chiapaneca, en la frontera con Guatemala, y enfilarse a la capital mexicana, a donde esperan arribar en un mes.
Al medio día, se encontraron con un retén conformado por policías estatales, municipales y elementos de la Guardia Nacional, a la altura del poblado de Viva México.
La mayoría de los integrantes de la caravana lo atravesaron corriendo. Sin embargo, hubo decenas de detenidos.
Los migrantes pernoctaron en la comunidad de Álvaro Obregón y este domingo reiniciaron su marcha hasta el municipio de Huehuetán, a donde esperan pasar la noche.
De acuerdo con activistas que acompañan a los migrantes, su principal exigencia es que el Instituto Nacional de Migración (INM) agilice los trámites para regularizar su estatus migratorio, a fin de que puedan transitar con libertad hasta la frontera con Estados Unidos, donde muchos esperan solicitar asilo.
