La decisión de Morena para que el proceso legislativo de la reforma eléctrica concluya hasta abril de 2022 abre la posibilidad de que discuta esta iniciativa con la oposición y acepte modificaciones, a fin de conseguir los votos necesarios para que sea aprobada.
Así lo indicó Ricardo Monreal Ávila, coordinador de Morena en el Senado, quien celebró la determinación, que dio a conocer el miércoles Ignacio Mier Velasco, líder de los morenistas en la Cámara de Diputados.
“El grupo parlamentario al interior saluda y aplaude la decisión (…) es un acto sensato de permitir que la discusión, que la deliberación pueda enriquecer la iniciativa”, expuso.
Señaló que el aplazamiento para abril “hace pensar que puede lograrse modificar la iniciativa original, porque de lo contrario para qué escucharlos o para qué entrar a un proceso de discusión con todos”.
Consideró que la actitud de los diputados es correcta al tener apertura para escuchar a los inversionistas, a los empresarios y todas las voces.
Entre tanto, adelantó que en el Senado permanecerán a la espera de que avance el proceso en la dependencia para que el tema llegue a los senadores.
Por otra parte, descartó las versiones de que el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, presionó para frenar la reforma eléctrica al reunirse con funcionarios del gobierno federal.
“Yo no creo que el presidente acepte presiones de ningún gobierno extranjero, yo creo que lo que hizo la Cámara de Diputados es un reflejo de lo que yo les había expresado, que será y sería la reina de las discusiones, que iba a empezar la tercera semana de noviembre”, opinó
