Ante las presiones inflacionarias, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) aprobó por mayoría volver a subir la tasa de interés de referencia; esta vez, en 25 puntos base, por lo que quedó en 4.50 por ciento.
De acuerdo con el banco central, la decisión se tomó considerando la necesidad de “reforzar la postura monetaria a fin de evitar afectaciones en las expectativas de inflación y propiciar un ajuste ordenado de precios relativos y la convergencia de la inflación a la meta de 3 por ciento”.
Y es que la inflación continúa por arriba del objetivo de Banxico, pues al finalizar julio se ubicó en 5.81 por ciento.
El reinicio del incremento de tasas ocurrió en junio, tomando por sorpresa al mercado con un aumento también de 25 puntos base en un contexto de un aumento imparable en la inflación y las señales de una política monetaria menos flexible en Estados Unidos sobre la cual, el banco central mexicano busca tomar ventaja.
Aunque la votación fue dividida, hubo acuerdo en que se trata de choques son transitorios, sin embargo, la defensa más fuerte para impulsar la tasa de interés es que se considera que por su diversidad, magnitud y el extendido horizonte en el que la han afectado estas presiones.
LPR
