El presidente de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF), Yon De Luisa, condenó los gritos homofóbicos en el debut de México en la Copa de Oro contra Trinidad y Tobago, aunque resaltó que los partidos son organizados por la Concacaf a la que también externó su desacuerdo en los arbitrajes.
Durante la conferencia de la FMF del lunes, Yon de Luisa y el gerente general de Xiaomi en Latinoamérica, Tony Chen, presentaron el nuevo convenio comercial entre la federación y la empresa de tecnología originaria de China, con un acuerdo en el que la desarrolladora de aparatos electrónicos patrocinará a la selección mexicana para lo que resta del proceso mundialista a Qatar 2022.
Sin embargo, durante la sección de preguntas y respuestas ante los medios, el evento se fue perfilando hacia los hechos ocurridos en el debut de México en la Copa Oro contra Trinidad y Tobago el pasado 10 de julio, específicamente con los con las acciones correspondientes a las polémicas con el arbitraje y la presencia de gritos homofóbicos soltados por aficionados en las gradas de estadio.
“No hay torneo que esté por arriba de integridad física”
Respecto al primer tema, De Luisa mencionó una preocupación por parte de la federación ante la integridad de sus jugadores en los partidos pitados por el arbitraje de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf), pues no solo se trató del último partido de la selección en el que Hirving Lozano tuvo que ser hospitalizado, sino que esta es situación que se remonta desde torneos y encuentros anteriores realizados bajo los estatutos de la confederación.
Asimismo, informó que ya han hablado de ello con la Concacaf, y que incluso ya le han enviado cartas la secretaría del organismo regulador del fútbol del Caribe, Norte y Centro América, del mismo modo como lo han hecho con la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA).
Ante ello, Yon De Luis sostuvo lo siguiente: “No hay ningún torneo que esté por arriba de la integridad física de mis jugadores, y eso lo vamos a pelear siempre, y vamos a exigir que se garantice la integridad de nuestros jugadores, y para eso vamos tener que dar todos los manotazos firmes que tengamos que dar.”
Respecto al árbitro del juego contra el equipo trinitario, el costarricense Ricardo Montero, el presidente expresó su desacuerdo sobre las decisiones tomadas por el central pero que a pesar de ello no pedirá la suspensión del colegiado.
“Hubo equivocaciones en el protocolo”
En cuanto a la insistencia de los aficionados por realizar gritos homofóbicos, la FMF mostró su desapruebo y condenó los hechos de los aficionados en el pasado partido de la selección y refrendó el compromiso para la erradicación de estas conductas discriminatorias y que además perjudican al deporte.
No obstante, De Luisa señaló que a pesar de que México sigue trabajando para cambiar esta situación, los partidos de Copa Oro son regulados por la Concacaf, siendo estos los encargados de llevar a cabo todas las medidas correspondientes. Es así que en juego de México contra Trinidad y Tobago, por su parte, no vio un buen protocolo por parte de la confederación con relación a la prohibición de actos de discriminación.
“Nosotros entendemos que es diferente ser nosotros los organizadores de los partidos, esos son un tipo de partidos. Otro tipo de partidos es cuando asistimos a torneos organizados por terceros, en donde nosotros podemos apoyar en ciertas actividades, pero no somos los responsables de la ejecución del protocolo como fue el día sábado, en donde el protocolo no se llevó a cabo correctamente”
Igualmente, indicó que se las ha informado de la posibilidad de que la misma Concacaf tome la decisión de que el siguiente partido de la selección mexicana sea realizado a puerta cerrada, pero que mientras no se confirme nada en la próximas horas, el juego, seguirá con su curso normal con presencia del público en las gradas.
En este caso, el próximo partido de México será en la Copa Oro por la jornada dos donde enfrentará a su similar de Guatemala, quien reemplazó el cupo de Curazao en el grupo “A” tras la salida de dicho equipo previo al torneo por casos Covid-19. Este partido se estaría jugando el 14 de julio en el Cotton Bowl de Texas a las 20:30 horas, tiempo del centro de México.
