Si aún no has ido a comprar tus esferas de Navidad a la bella ciudad de Chignahuapan, Puebla, a dos horas y media de la capital de ese estado, es momento que lo hagas, pues encontrarás de vidrio soplado de todos los colores y tamaños.
Este municipio, de clima templado y frío, está localizado en la Sierra Norte de Puebla y al llegar aún te encuentras con ese olor a leña característicos de los lugares boscosos.
Chignahuapan, que significa “donde abunda el agua” en náhuatl, es el principal productor de esferas navideñas artesanales de vidrio soplado del país y es considerado Pueblo Mágico desde 2012 por sus diversos atractivos culturales y naturales.
Esta localidad tiene una capacidad productiva de más de 3 millones de esferas navideñas al año en 200 talleres y sus costos por caja oscilan entre los 20 y 500 pesos, dependiendo del diseño, tamaño y materiales de las mismas.
Cada fin de semana en algunas calles del centro se coloca el Tianguis de Esferas en el que venden los últimos modelos de esferas.
También, este 25 de noviembre se tiene proyectado la realización de la Feria del Árbol y la Esfera, que generalmente se celebra entre finales de octubre y noviembre, con el fin de poner a la venta árboles que decoran los hogares en Navidad.
Además, Chignahuapan cuenta con atractivos turísticos fuertes como las aguas termales, la parroquia, la basílica, los bosques, el turismo de aventura, además de su rica gastronomía como los platillos regionales de barbacoa, el consomé de borrego, tlacoyos de alberjón, mole poblano y chicharrón prensado o los dulces de calabaza, tejocote, jaleas, jamoncillos de pepita y de piñón, pan de queso y licores de frutas.
Cabe mencionar que la fiesta patronal de Chignahuapan es el 25 de julio, cuando se realiza una procesión, juegos pirotécnicos y comida para los visitantes.
RE: LPR
