De cara a la renovación de la dirigencia estatal del PRI, que será en octubre, el partido debe analizar los resultados electorales de junio, pues “no fueron favorables” y “hacer mucho trabajo” para recuperar la confianza de la gente para que vuelvan a votar por el tricolor.
Así lo consideró, en entrevista, la actual diputada local, Roció García Olmedo, quien señaló que se tiene que hacer trabajo político y “echar manos a la obra” no solo para la elección de la dirigencia, sino internamente entre militantes de cara al siguiente proceso de 2024.
Al cuestionarla sobre si el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ya quedó relegado a la tercera fuerza política en el estado, por debajo del PAN y Morena, manifestó que eso habla de que se debe hacer, no solo labor de estructura, sino también partidista con los militantes.
“Para mí el recuento no es favorable y eso amerita hacer un análisis. No nos fue muy bien como partido político, como coalición nos favoreció en incremento de ayuntamientos que vamos a gobernar, pero en las diputaciones federales las que contendieron militantes del PRI todas se perdieron”, asentó.
Dijo que la coalición que se hizo con los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) solo fue electoral y no política, lo cual está permitido en la ley, aunque señaló que se deben “clarificar” los compromisos que se asumen en estas alianzas.
“Eso habla de que en el partido hay que trabajar duro para que vuelvan a presentarse las condiciones en procesos electorales futuros, el PRI tiene que trabajar mucho en recuperar la confianza para que la gente vuelva a otorgárnosla y vote por nosotros”, expresó.
García Olmedo comentó que quien aspire a competir por la presidencia del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI debe tomar en cuenta esta situación que está viviendo el partido, pues todo lo que se haga debe ser con miras en la siguiente elección donde se competirán por todos los cargos en Puebla.
Camarillo puede competir por dirigencia
Detalló que la convocatoria deberá publicarse en octubre por la dirigencia nacional para que se puedan inscribir, incluso Néstor Camarillo Medina, actual líder del tricolor en Puebla, puede competir debido a que no fue electo como líder del partido, sino que fue designado por el CEN para estar al frente durante el proceso electoral.
Esto, porque sostuvo que debe concluir oficialmente el proceso electoral, ya que se tienen impugnaciones pendientes tanto en distritos locales como en ayuntamientos, las cuales deben resolverse primero para poder hacer posteriormente la renovación.
Es necesario precisar que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI designó a Camarillo Medina como dirigente estatal provisional en Puebla, en julio del año pasado, debido a que por la pandemia de Covid-19 no se pudo realizar reuniones para elegir a quien quedaría en dicho cargo.
