Luego de que Emilio Maurer Espinosa llamó “esquizofrénica” a Mónica Rodríguez Della Vecchia, la panista pidió que el legislador sea sancionado por violencia política de género, pero la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso, Guadalupe Muciño Muñoz, se negó a leer su escrito.
Lo anterior, durante la sesión del Congreso local de este jueves, donde Rodríguez Della Vecchia ingresó un oficio vía miscelánea para pedir una sanción en contra de su compañero por la ofensa que le hizo el pasado 2 de marzo, cuando la llamó “esquizofrénica mujer”, sin embargo, bajo el pretexto de que el escrito llegó tarde, Muciño Muñoz se limitó a leer el extracto y no el documento completo.
Además, a la diputada panista se le apagó varias veces el micrófono, lo cual fue catalogado como una falta de respeto por varios diputados, entre ellos, Héctor Alonso Granados, quien deseó que la presencia de Muciño Muñoz, diputada del PT, no se empiece a caracterizar por muestras de autoritarismo.
Por su parte, la diputada petista afirmó que los micrófonos se cierran para “evitar vicios de ruido”, aunque Nancy Jiménez Morales señaló que la petición de no cerrar los micrófonos era algo que ya se había solicitado.
En tanto, el también integrante del PAN en el Congreso, Oswaldo Jiménez López, acusó que la Mesa Directiva estaría “protegiendo” a Maurer Espinosa, por lo que no se le quiso dar lectura al oficio de Rodríguez Della Vecchia.
En el oficio, la panista pide que se le imponga una sanción al diputado Maurer Espinosa por la violencia política de género ejercida contra ella, así como se expidiera una copia certificada de la sesión anterior donde ocurrieron los hechos.
Lo anterior, debido a que sus dichos tuvieron como fin denigrarla y descalificarla, con base en estereotipos de género para limitar su derecho al voto legislativo.