En los primeros dos años del actual gobierno federal, la Secretaría de Gobernación (Segob) ha registrado el hallazgo de 399 fosas clandestinas, donde presuntos integrantes de la delincuencia organizada han depositado 2 mil 290 cuerpos; la mayoría en Jalisco y Guanajuato.
Así lo dio a conocer este miércoles el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Segob, Alejandro Encinas Rodríguez, al presentar el informe sobre desaparición forzada en México, y detalló que 879 restos ya fueron identificados, y de ellos 504 ya fueron entregados a sus familiares.
El funcionario detalló que el municipio de Tlajomulco de Zúñiga, en Jalisco, tiene el mayor registro de cuerpos hallados, con 171; le sigue El Salto, de la misma entidad, con 115.
Salvatierra, Guanajuato, se ubica en el tercer lugar, con 75 exhumaciones. Pero Encinas Rodríguez adelantó que esta cifra será mayor, ya que aún falta recibir el reporte de la Fiscalía General del Estado (FGE) sobre fosas halladas en el municipio de Cortázar.
Respectos a las fosas, indicó que que el municipio de Úrsulo Galván, en Veracruz, ocupa el primer lugar, con 75 fosas; en segundo lugar está Salvatierra, Guanajuato, con 65 fosas; en tercero, Playa Vicente, Veracruz, con 45; en cuarto, Acapulco de Juárez, Guerrero, con 36; y en quinto Puerto Peñasco, Sonora, con 35.
Sobre los desaparecidos, expuso que, desde diciembre de 2018, en Jalisco se han reportado 3 mil 567 personas desaparecidas o no localizadas; mil 235 en Guanajuato; mil 222 en Sonora; mil 214 en Tamaulipas; mil 197 en la Ciudad de México y mil 40 en Nuevo León.
