Tras difundirse que Estados Unidos planea enviar a mexicanos solicitantes de asilo a Guatemala para que sigan su proceso allá, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) expresó su desacuerdo con la medida, que afectaría a 900 paisanos a partir de febrero.
A través de un comunicado, la dependencia reconoció que se trata de una disposición propia de la jurisdicción estadounidense y señaló que el gobierno mexicano trabajará para ofrecer mejores opciones a los mexicanos que pudieran ser afectados.
Prometió también dar puntual seguimiento al cumplimiento de los derechos humanos contemplados en los acuerdos internacionales firmados y ratificados tanto por México como por Estados Unidos.
Por su parte, Martha Bárcena Coqui, embajadora mexicana en Estados Unidos, indicó que este país y Guatemala excluyeron a México del proyecto y remarcó que los mexicanos podrán evitar la deportación si deciden regresar a su país.
En tanto, Olga Sánchez Cordero, Secretaria de Gobernación, adelantó que esta dependencia y la SRE determinarán cómo proceder ante la medida, que fue revelada por funcionarios del Departamento de Seguridad Interior estadounidense.