Rosario Robles Berlanga, extitular de Sedesol y de Sedatu, rechazó colaborar con la FGR y testificar contra exintegrantes del gabinete de Enrique Peña Nieto a cambio beneficios; tras ello, un juez negó invalidar su juicio y ordenó que siga presa.
Este lunes, a horas de la audiencia judicial intermedia, se difundió en Twitter una carta firmada por la exfuncionaria, donde se negó a señalar a excolegas suyos de mayor jerarquía.
“También sé que lo que pretenden para que yo tenga mi libertad (como en otros casos) es que señale como responsables a excolegas míos, de mayor jerarquía en el gabinete del sexenio pasado, con el objetivo de dirigir hacia ahí sus baterías”, expuso.
Robles Berlanga, acusada de malversación de fondos y abuso de autoridad, aseguró que no quiere que “se abran estas pesadas puertas con la mentira y la falsa delación disfrazada de testigo colaborador”.
Incluso dijo tener información “confiable” sobre ofertas de “impunidad” a excolaboradores suyos a cambio de testimonios que la incriminen.
“Su teoría, sus hipótesis, nada tienen que ver con la verdad. Yo no mentiré para obtener mi libertad. No quiero salir por la puerta de atrás”, afirmó.
Posteriormente, el juez Ghanter Alejandro Villar Ceballos rechazó invalidar el proceso penal de la experredista, como lo solicitó su defensa, por lo que la exsecretaria permanecerá en prisión.
