El presidente Andrés Manuel López Obrador presentó su iniciativa de reforma integral para “poner orden” en esquema de subcontratación y outsourcing, a fin de que empresas dejen de simular contratos con trabajadores y evadir impuestos.
Este jueves, durante su conferencia de prensa matutina, el mandatario sostuvo que la subcontratación niega prestaciones y derechos a los trabajadores, pues permite a las empresas despedirlos al finalizar el año y recontratarlos a discreción.
“Estamos seguros de que los legisladores van a analizar a profundidad esta propuesta y, en su caso, podrá aprobarse; ojalá sea lo más pronto posible”, expresó al firmar el documento, que se envió a la Cámara de Diputados.
De acuerdo con la secretaria del Trabajo, María Luisa Alcalde Luján, la reforma plantea regular tres formas del llamado outsourcing: la subcontratación de personal; los servicios y de obras especializadas; y las agencias de colocación
Para ello, propone la modificaciones y armonización de la Ley Federal del Trabajo, el Código Fiscal, así como las leyes del Seguro Social, Infonavit, ISR e IVA.
En este sentido, prohíbe la subcontratación de personal para que una persona física o moral ponga a disposición a trabajadores propios en beneficio de otra.
Respecto a los servicios especializados se regula la prestación de servicios u obras especializadas que no formen parte del objeto social ni de la actividad económica de la empresa beneficiaria. Se requerirá una autorización y estarán en un padrón público.
En tanto, las agencias de colocación podrán intervenir en el reclutamiento y capacitación pero no serán patrones ni podrá contratar en sustitución.
Cada año, 200 mil puestos de subcontratación
Las STPS señaló que cada año se crean 200 mil puestos para trabajadores subcontratados, por parte de empresas grandes de más de 250 empleados, principalmente en los sectores de manufactura y servicios.
Estas compañías dan a los trabajadores con pensiones mínimas al cotizar con sueldos bajos; así mismo menores aportaciones al fondo de vivienda; despidos hacia fin de año para no generar antigüedad, omisión en pago de liquidaciones y poca estabilidad del empleo.
Puso como ejemplo que un hotel en Cancún tiene registrados 802 trabajadores que laboran para otras empresas, pues sólo 2 personas estaban registradas para el establecimiento; a través de 14 empresas subcontratistas distribuyó a las otras 800 personas con lo que se culminó en 40 personas trabajadoras sin registro en el IMSS, 762 con un salario mínimo falso que eran contratadas cada tres meses por diferentes empresas y ninguna de las personas empleadas conocía a su patrón.