Pese a detectar a una persona empleada con síntomas de Covid-19, cuyo pariente ya dio positivo, la gerencia del call center Alorica, ubicado en Puebla Capital, instruyó a quienes estuvieron en contacto con ella guardar silencio sobre el caso y seguir asistiendo a las oficinas.
Así lo relataron trabajadores de la empresa, quienes resaltaron que esta situación se agrava porque no hay una adecuada sanitización de las cabinas donde laboran los agentes (empleados que toman las llamadas), ni se aplican correctamente las medidas de sana distancia, además de que se intentan burlar las inspecciones de Protección Civil.
Pidiendo anonimato por temor a represalias, hicieron llegar a este medio una chat de WhatsApp donde la empleada posiblemente enferma le comenta a un superior que, el pasado miércoles, se enteró que uno de sus familiares con el que había tenido contacto directo había dado positivo al coronavirus.
Al reportar lo anterior a sus jefes, le indicaron que acudiera a la enfermería de la empresa, donde un médico le preguntó acerca de sus síntomas y ella refirió tener dolor en cuerpo y garganta, así como congestión nasal, los cuales están asociados a la enfermedad Covid-19.
También le solicitó detalles acerca del contacto que había tenido con su familiar contagiado y le pidió los nombres de los compañeros de trabajo con los que había convivido ese día.
Por último, le proporcionó cubrebocas y guantes, además de dejarle en claro que no podía comentar su caso con nadie para “no causar pánico”.
Sólo les prometen sanitización contra “bacterias”
Por otra parte, aseguraron que los jefes solo se comunicaron con la persona posiblemente enferma para comunicarle que si daba positivo al virus que causa Covid-19 sólo sanitizarían el lugar porque “así lo marca el protocolo”.
“El protocolo de Alorica es pedirle a la persona (con síntomas) que acuda al IMSS para que sea evaluada y una vez que tengamos la respuesta dar el seguimiento (…) En el inter (dentro una semana o más), lo que hacemos es sanitizar completamente el área (…) para evitar que cualquier bacteria estuviera en el ambiente”, les dice una de las gerentes en la llamada, la cual fue grabada.
También les pide que nos “apoyen manteniendo la comunicación de forma confidencial. No implica que nosotros estemos ocultando la información, estamos dando la cara, pero sí para evitar gente con nerviosismo”.
No obstante, una de las trabajadoras le manifiesta su preocupación porque la persona que podría tener Covid-19 aún acudió a trabajar el pasado lunes y miércoles, después de que el sábado pidiera permiso para estar en contacto directo con su familiar enfermo.
Incluso revela que ella estuvo en contacto directo con la persona posiblemente contagiada y, a su vez, ha compartido lugares comunes con toda la plantilla laboral.
Empresa va contra medidas de Salud
También le remarca que sabe que una persona que entra en contacto con otra infectada inmediatamente se tiene que considerar sospechosa y ser puesta en aislamiento preventivo, lo cual también aplica para los compañeros de trabajo que estuvieron en contacto con ella.
En efecto, según la Guía de Acción para los Centros de Trabajo ante el Covid-19, emitida por la Secretaría de Salud federal, indica las siguientes medidas:
6.4.2. “Enviar a casa al personal con síntomas de la enfermedad y remitirlo a su domicilio particular”.
6.4.3. “Identificar a trabajadores que hayan estado en contacto con una persona infectada y enviarlos a casa. Indicarles que, en caso de presentar síntomas, acudan a revisión médica”.
También establece que los centros laborales deben “fomentar y brindar confianza para que las y los trabajadores se retiren ante la presencia de síntomas de la enfermedad, a través de la simplificación de trámites de incapacidad y la eliminación de descuentos por ausencia”.
Vale mencionar que estas medidas aplica para empresas y dependencias públicas consideradas “esenciales”, categoría en la cual no entre ningún tipo de call center, de acuerdo con el decreto federal de emergencia sanitaria por Covid-19, emitido desde el 31 de marzo y que se extiende hasta el 30 de mayo.
En la misma comunicación, otra empleada le manifiesta a la gerente que ella, pese a ser supervisora, nunca ha visto que se aplique la limpieza de la estaciones de trabajo de los agentes cada tres horas, pese a que así lo marca el protocolo de la compañía.
De hecho, relata cómo los, en el cambio de turnos, los empleados llegan a ocupar inmediatamente la computadora que usaron sus compañeros hace apenas unos minutos.
Sin embargo, la gerente le revira que encuentra “difícil de creer” lo que que le dice y sólo promete que se va a revisar el tema.
Ante esta actitud de la empresa y su gerencia, los empleados que contactaron a este medio dar difusión a su relato, pues les preocupa un contagio masivo y critican que se oculte información.
