Alberto Jiménez Merino, candidato a la gubernatura de Puebla por el PRI, aseguró que cuenta con el voto duro del partido, al tiempo de sostener que más simpatizantes se siguen sumando a él e informó que el viernes iniciará su campaña en los municipios.
En entrevista realizada este jueves, el priista indicó que en este nuevo proceso electoral “nadie se puede asumir como ganador”, ya que apenas está empezando y aún les quedan más de 50 días para poder posicionarse.
Indicó que, de acuerdo con el resultado de la última elección, está seguro de obtener alrededor de 500 mil votos “leales”, por lo que buscará convencer a otras corrientes y ciudadanos indecisos con una campaña de propuestas, para conseguir otros 400 mil, a fin de poder ganar.
Ante la pregunta de si contempla atraer a gente que apoyó al senador Alejandro Armenta Mier y a panistas, que no están convencidos de apoyar al abanderado de sus respectivos partidos, dijo que “invitaré a los militantes de todas las corrientes”.
Invita a unírsele sin importar color
Resaltó que “nunca ha visto colores” y cuando le han propuesto un proyecto lo ha atendido sin importar la militancia, por lo que llamó a los interesados a que se integren a su proyecto, pues aseveró que “decenas de personas” ya se han unido a él, aunque no dio nombres.
Informó que después de haber visitado las juntas auxiliares de Puebla capital, el próximo viernes comenzará su campaña en Coronango a las 12:00 horas, para después ir a otros municipios como Chignahuapan y Huehuetlán el Chico.
Respecto al alza del pasaje, sostuvo que cuenta con un “proyecto integral de movilidad y transporte eficiente y seguro de bajo costo para la zona metropolitana” y que en su gobierno se encargaría de vigilar que haya un equilibrio en el aumento al costo del transporte público que piden los transportistas, con el fin de que “todos ganen y haya mejores servicios”.
