A 13 días del asesinato de 14 policías en una emboscada, la violencia no cesa en Michoacán, donde un enfrentamiento entre policías y sicarios del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) dejó cinco muertos, más ocho de ejecuciones atribuidas a este grupo delincuencial.
De acuerdo con la Fiscalía del Estado, los decesos se registraron durante diversos hechos en el transcurso del sábado y el que dejó más víctimas tuvo lugar en pleno centro histórico de Morelia, la capital, donde policías ministeriales catearon una “casa de seguridad” del CJNG.
Al ingresar al inmueble, ubicada en la colonia Gertrudis Bocanegra, una decena de sicarios los recibieron a tiros, por lo que respondieron al ataque y se desató una balacera que cobró las vidas de un policía y cuatro presuntos criminales.
En el lugar, la Fiscalía incautó vehículos, rifles de asalto, pistolas, dosis de droga, chalecos antibalas y otros indicios que la hacen suponer que los detenidos y abatidos forman parte del CJNG.
Previamente, el organismo informó sobre el hallazgo de los cadáveres de cuatro personas, quienes habrían sido torturadas y asesinadas a balazos en las colonias Constituyentes de Querétaro, Presa de Los Reyes y Villas del Real, así como en la carretera estatal Morelia-Pátzcuaro.
Por su parte, la Policía de Michoacán dio a conocer que, en el municipio de Uruapan, otras cuatro personas fueron asesinadas a balazos en tres hechos distintos.