De madrugada y aún sin acuerdos con la CNTE, la Cámara de Diputados aprobó este jueves la nueva reforma educativa, que deroga la de 2013, desapareciendo el INEE y reconociendo nuevos derechos; el gobierno celebró el aval a su iniciativa, que pasa al Senado.
Con 356 votos a favor, 61 en contra y 2 abstenciones, el dictamen quedó aprobado en lo general y lo particular a las 2:45 de la mañana, tras casi siete horas de discusión, donde se logró la mayoría calificada, pese a la oposición de diputados del PAN, PRI, sin partido e incluso del PT y Morena.
Y es que, si bien estaba previsto que la reforma se votara en un periodo extraordinario, desde el martes pasó al pleno para primera lectura y el miércoles se modificó el orden del día para discutirla y eventualmente aprobarla.
En respuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador remarcó que cumplió su promesa de echar abajo la “mal llamada reforma educativa”, del gobierno de Enrique Peña Nieto, mientras que el secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán resaltó las “diferencias” de la nueva legislación, como el reconocimiento de la educación superior como obligatoria.
En tanto, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) acusó a Morena y al presidente de traicionar al “gremio” con un “albazo”, que aprovechó el periodo vacacional, por lo que advirtieron que su lucha continuará otro sexenio.
Educación superior y apoyo a jóvenes
De acuerdo con el dictamen aprobado, se modificó el artículo 3 constitucional para garantizar la Educación Superior, de forma que la redacción de la fracción segunda de este ordenamiento quedará así:
“La Federación, Entidades Federativas y Municipios impartirán la educación preescolar, primaria, secundaria, media superior y superior. La educación preescolar, primaria y secundaria conforman la educación básica; esta, la media superior y la superior serán obligatorias”.
En el mismo artículo, ahora se contempla la obligación del Estado para establecer “directrices y medidas tendientes a garantizar la equidad de la educación”, como acciones alimentarias en zonas vulnerables y respaldo a estudiantes en “desventaja socioeconómica”.
Maestros será trabajadores del Estado
Uno de los aspectos más polémicos de la reforma es el artículo 16 transitorio, pues señala que los derechos laborales de los docentes se regirán ahora por el apartado B del artículo 123 de la Constitución federal, lo cual significa que serán reconocidos como trabajadores del Estado.
La bancada del PAN, que votó en contra, acusó que esta modificación es una “manzana envenenada”, pues elimina el sistema de evaluación para la promoción y permanencia de los maestros.
En adelante, la evaluación a docentes no determinará su permanencia en la sistema educativo, por lo que el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) desparecerá para dar paso al Centro Nacional para la Revalorización del Magisterio y la Mejora Continua de la Educación.
Este nuevo organismo, que estará integrado por un consejo directivo de siete miembros y un consejo consultivo de académicos y padres de familia, evaluará a los docentes mediante equidad educativa, actualización constante y fortalecimiento de las escuelas normales.
En este sentido, el Sistema Profesional Docente será sustituido por el Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros.
Editado por Luis Alberto Palacios
