Con el 84 por ciento de las actas escrutadas, Evo Morales, quien busca su cuarto mandato, habría obtenido el 45 por ciento de los votos, mientras que el candidato Carlos Mesa el 38 por ciento; en este escenario, debería haber en Bolivia una segunda vuelta electoral.
Este fin de semana se vivió en Bolivia una de las jornadas electorales más cerradas, debido a que en los últimos 37 años no había la oportunidad de recurrir a una segunda vuelta electoral.
Para ganar en primera vuelta, alguno de los candidatos debía lograr más del 50 por ciento de los votos válidamente emitidos o un mínimo del 40 por ciento con una diferencia de 10 puntos frente a la segunda alternativa más votada pero como eso no sucedió, habría segunda vuelta.
El conteo de las actas escrutadas causó polémica, cuando el recuento fue suspendido al llegar al 83.7 por ciento, provocando denuncias de parte de la campaña de Carlos Mesa y solicitudes de aclaración de la misión electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Por su parte, Morales festejó “un triunfo más” y también “conservar la mayoría” en la Asamblea, mientras que Mesa dijo que su triunfo es haber conseguido la segunda vuelta.
Morales es el presidente latinoamericano actual con un mandato continuado más largo por delante de Daniel Ortega, de Nicaragua, quien lleva 20 años pero interrumpidos.
La situación en Bolivia se ha polarizado debido a que en 2016 ganara el “no” al buscar un referéndum para permitirle reformar la Constitución para aspirar a una nueva reelección, pero las decisiones judiciales finalmente habilitaron su postulación.
Por un lado hay quienes ven con buenos ojos los logros políticos de Morales debido desde que está en el gobierno, Bolivia ha crecido una media de 4.8 por ciento al año, y según el Fondo Monetario Internacional (FMI) es el país de América Latina que más crecerá este año con un 3.9 por ciento.
Además, su gestión ha conseguido reducir la pobreza extrema del 38 por ciento al 15 por ciento pero con una economía excesivamente dependiente de la exportación del gas.
Pero por el otro lado están los que ven en la figura de Evo una posible autocracia siendo Mesa el principal opositor con su lema “Ya es demasiado”.
Fuentes: BBC / RT / El comercio
Editado por Jorge Luna