El gobierno federal, a través de la Secretaría de Marina (Semar), destinará un presupuesto de 52 millones de pesos para implementar una estrategia de contención del sargazo (alga tóxica) en el mar y evitar que se acumule en las playas de Quintana Roo.
Así lo anunció este lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador, durante su conferencia de prensa matutina, ahora realizada desde Cancún, donde en la víspera también aseveró que el problema de la llegada masiva de sargazo a las playas “no es gravísimo” como se señala en medios de comunicación.
Al explicar el plan, José Rafael Ojeda Durán, titular de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), señaló que la “situación” será atacada como un tema “de Estado” y no “de negocio”, por lo que no se licitarán servicios ni habrá contratos con empresas, sino que se capacitará a marinos para este trabajo.
Detalló que el gobierno federal construirá de 10 a 12 sargaceras (con consto de 30 millones de pesos) y se comprarán barreras (por 14.5 millones) para desviar y contener el arribo de las macroalgas.
Asimismo, se va a traer un barco especial desde Ensenada, Baja California, y escalómetros, para monitorear previamente la llegada de manchas de sargazo.
Respecto a qué hacer con los cientos de toneladas de sargazo retirado de mar y el litoral, sólo indicó que habrá pláticas con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y universidades para investigar cómo utilizar esta alga, a fin de crear “tiraderos por toda la península de Yucatán”.
El Sistema de Alerta Temprana de la Red de Monitoreo del Sargazo Cancún anticipó la llegada masiva de sargazo al litoral quintanarroense en junio, julio y agosto.
Apenas el 20 de junio, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) advirtió que en Quintana Roo 25 playas concesionadas a privados son un riesgo para la salud de bañistas, pues hay grandes cantidades de esta alga en descomposición.
