El Consejo Político Nacional del PRI determinó no aceptar la propuesta del INE para que este organice su elección de nueva dirigencia, a condición de que el partido depure su padrón de militantes, y decidió llevar a cabo el proceso de forma independiente.
Lo anterior, durante la sesión extraordinaria celebrada este lunes en la Ciudad de México, donde la mayoría de los 380 consejeros presentes votó a favor de que los comicios se organicen “desde casa”, ante los condicionamientos del Instituto Nacional Electoral (INE) para llevar a cabo la encomienda.
La autoridad electoral estableció que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) debía pagar multas de hasta 51,740 pesos por cada militante afiliado indebidamente, presentar un padrón en mayo, para cumplir con los tiempos para los comicios, y pagar 230 millones de pesos por la organización de sus elecciones internas.
Actualmente, el PRI tiene aproximadamente 6.5 millones de afiliados, pero desde 2014 enfrenta denuncias ciudadanas por irregularidades en la inscripción de los militantes.
De acuerdo con Claudia Ruiz Massieu, actual presidenta nacional del PRI, hay seis aspirantes a este cargo: Ivonne Ortega Pacheco, Lorena Piñón, Alejandro Moreno Cárdenas, José Narro, Ulises Ruiz y José Ramón Martel López.
