Pese a que Mario Marín Torres apareció en su registro como candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la gubernatura, Alberto Jiménez Merino afirmó que “me deslindo”, pues sostuvo que el exgobernador no aparecerá en la boleta, sino él.
De acuerdo con el académico, para él son importantes y “bienvenidos” todos los militante priistas, “desde el más humilde hasta el más encumbrado”, pero aseguró que será “promotor” de que respondan ante la justicia aquellos que tengan que hacerlo.
Lo anterior, este miércoles en entrevista con Carlos Loret de Mola, donde el político también aseguró que puede caminar con la frente en alto y pedir el voto de los poblanos, pues nunca ha sido amigo de la corrupción.
Al preguntarle por la imagen negativa que tiene el PRI, consideró que hay “una percepción de corrupción que ha acompañado a algunos actores” y atribuyó a esta situación que las encuestas lo pongan en tercer lugar de preferencia de voto.
No obstante, resaltó que él tiene una trayectoria de más 30 años en el tricolor y la academia, con honestidad y esfuerzo propio, por lo que incluso afirmó en que hay gente que ha confirmado que “van por él, no por el partido”.
Respecto a la veda electoral, señaló que confía en que el presidente Andrés Manuel López Obrador no se meterá en los comicios, y en que el gobierno estatal garantizará “un proceso limpio”, a diferencia del de 2018.
El pasado 15 de marzo, Jiménez Merino, al rendir protesta como candidato del PRI para gubernatura de Puebla, estuvo respaldado por Marín Torres, quien obtuvo gran atención de los medios de comunicación.
Cabe mencionar que, respecto al caso de tortura en 2005 contra la periodista Lydia Cacho Ribeiro, quien ha acusado a Marín Torres de ser el autor intelectual, el propio gobernador reiteró en días pasados que, para él, debe olvidarse, pues en 2008 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) lo exoneró.
