La CNDH instó a que Puebla y nueve entidades más tengan cada uno al menos una prisión femenil, pues el 59.8 por ciento de las reclusas en México se encuentra en centros penitenciarios mixtos, que carecen de espacios dignos y servicios específicos para las internas.
De los 300 centros penitenciarios del país, sólo 18 son femeniles y albergan al 40.2 por ciento (4 mil 209 personas) de las mujeres privadas de libertad.
Entre los estados con centros penitenciarios exclusivos para mujeres se encuentran Aguascalientes, Coahuila, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Jalisco, Morelos, Oaxaca, Querétaro, Sonora, Yucatán, Zacatecas y Nayarit.
En el marco del “Día Internacional de la Mujer” –8 de marzo—, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) reafirmó la necesidad de brindar atención con perspectiva de género a las mujeres que se encuentran o han estado en prisión, garantizándose además la existencia de una prisión femenil por cada entidad federativa.
Así lo señaló en un foro donde el eje central del evento fueron las Reglas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de las Reclusas y Medidas No Privativas de la Libertad para Mujeres Delincuentes, conocidas como “Reglas de Bangkok”.
Hijos de reclusas en las prisiones
Dichas reglas instan a gobiernos, organismos e instituciones a que den mayor atención a la cuestión de las mujeres que se encontraban en prisión, incluidos los hijos de algunas prisioneras que viven con ellas en las cárceles. Este primer paso derivó en la aprobación de las Reglas para el Tratamiento de las Reclusas y Medidas No Privativas de la Libertad para las Mujeres Delincuentes o Reglas de Bangkok, en 2010.
Por ello, la CNDH reiteró la necesidad mínima de contar con una prisión femenil por cada entidad federativa, con las condiciones necesarias para la atención de los niños que viven con sus madres, para mejorar la situación de las mujeres en reclusión y garantizar el respeto a sus derechos fundamentales.
En el evento se contó también con testimonios de mujeres que han transitado por la prisión, así como con la participación de especialistas y académicas.
Cabe mencionar que de acuerdo con el documento “Estudios sobre el cumplimiento e impacto de las recomendaciones generales, informes especiales y pronunciamientos 2001-2017”, Puebla ocupó el tercer lugar con más violaciones a derechos humanos en prisiones de mujeres, además de encontrar la presencia de prostitución en las cárceles de la entidad.
