La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) se sumó al Banco de México (Banxico) y al FMI, que han ajustado a la baja la perspectiva de crecimiento económico de México para este 2019, al reducirla del 2.5 al 2 por ciento.
En respuesta, tanto el presidente Andrés Manuel López Obrador como el secretario de Hacienda, Carlos Urzúa Macías, minimizaron estos pronósticos y reiteraron su estimación de que la economía mexicana seguirá creciendo y va bien.
“Estoy seguro que el país va a crecer; no sólo eso, se va a convertir en una potencia económica porque tiene todo: muchos recursos naturales, un pueblo trabajador y algo que le hacía falta, un buen gobierno”, expuso el presidente en su conferencia de prensa matutina.
Por su parte, Urzúa Macías pidió “no hacer una tormenta en un vaso de agua” por las estimaciones a la baja de calificadoras y agencias sobre la deuda soberana y de paraestatales, como Standard and Poor’s y Fitch Ratings, pues remarcó que “no bajaron las calificaciones, bajaron nada más las perspectivas”.
El pronóstico de la OCDE se suma a las bajas proyecciones para México de Banxico y el Fondo Monetario Internacional (FMI), quienes han reducido las perspectivas de crecimiento del país por debajo de 1.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
En tanto, la bancada de Morena en el Senado adelantó que este jueves promoverá una iniciativa de reforma a la Ley del Mercado de Valores, a fin de sancionar a las calificadoras que “descalifiquen” México sin transparencia ni objetividad.
“Llegamos tarde a esta regulación, que ya ha ocurrido en otros países, luego de experiencias vergonzosas como fue cuando Standard & Poor’s le dio calificación de “A” a Leeman Brothers, causante de la crisis de 2008, en el mismo mes de su quiebra”, sostuvo Salomón Jara Cruz, vocero de dicho grupo parlamentaria.
