En los comicios del 1 de julio, el 71 por ciento de los electores desaprobaba el gobierno de Enrique Peña Nieto, y sólo 24 por ciento manifestaba algún grado de aprobación; se trata del nivel de descontento más alto durante los últimos tres sexenios.
Así lo muestran los resultados de la encuesta “¿Estaba el Presidente en la boleta el primero de julio?”, realizada por la consultora Parametría, donde se indica que, desde la toma de posesión de Peña Nieto, en diciembre de 2012, la aprobación de su trabajo descendió 31 puntos, en tanto que la desaprobación aumentó 60.
Esta tendencia se agudizó en las elecciones intermedias de 2015, cuando la opinión negativa hacia Peña Nieto era de 52 por ciento y la positiva había bajado hasta 42 por ciento.
En contaste el expresidente Vicente Fox Quesada terminó su sexenio (2000-2006) con una desaprobación de 19 por ciento y una aprobación del 62, mientras que su sucesor, el también panista Felipe Calderón Hinojosa, acabó su gestión con descontento del 35 por ciento.
Desaprobación según el candidato
La medición tomó en cuenta el candidato por el que votó cada encuestado, de tal forma que al cruzar las variables de aprobación del presidente actual y preferencia electoral, detectó que 88 por ciento de quienes votaron por López Obrador reprobaban el trabajo de Peña Nieto.
El 75 por ciento de las personas que votaron por el panista Ricardo Anaya Cortés desaprobaba en alguna medida la gestión del mandatario priista; incluso, un 32 por ciento de quienes eligieron a José Antonio Meade Kuribreña, abanderado del PRI, desaprobaron al actual jefe de Estado.
Asimismo, destacó que el 91 por ciento de quienes sufragaron por Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, desaprobó la labor de Peña Nieto.
