Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de Juntos Haremos Historia, llamó a realizar un voto masivo por esta coalición y cuidar las casillas este 1 de julio para asegurar el “triunfo contundente” de la “cuarta transformación” de México.
Este miércoles, ante decenas de miles de personas reunidas en el Estadio Azteca de la Ciudad de México para asistir a su cierre de campaña, el tres veces aspirante a la Presidencia aseguró que este cambio será pacífico, a diferencia de los que le preceden, pero “radical” porque su gobierno acabará con el “régimen corrupto” y construirá una “auténtica democracia”.
“Que nadie se asuste (…) esta transformación va a consistir precisamente en arrancar de raíz al régimen corrupto de injusticias y de privilegios”, precisó.
En un discurso donde resaltaron las referencias históricas, reivindicó al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) como heredero y continuador de tres “revoluciones”: la Independencia, que inició en 1810; la Reforma, en 1857, y la Revolución, en 1910.
Rememoró también los movimientos sociales del siglo XX, como el de los estudiantes del 1968 y el de los ferrocarrileros de 1958, así como a políticos y activistas de la talla de Demetrio Vallejo, Rubén Jaramillo, Heberto Castillo, Cuauhtémoc Cárdenas, Manuel Clouthier y Rosario Ibarra de Piedra, a quien –adelantó– dará su voto.
Separar Estado de poder económico
Entre los planteamientos más resaltables de su arenga, que se extendió entres 21:00 y 21:50 horas, el abanderado de la coalición formada por Morena y los partidos del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES) insistió en que, como Benito Juárez separó Iglesia y Estado, él separará al Estado del poder económico.
En este sentido, se comprometió a conformar un gobierno que represente a todas las clases sociales y que no sea un “comité” al servicio de una minoría privilegiada.
Su administración –sostuvo– respetará las libertades de expresión, de prensa y religiosa, además que no considerará a sus adversarios como enemigos, puesto que buscará la unión y la concordia “hasta donde sea posible”.
Va contra corrupción y pobreza
Otro de los puntos en los que insistió el tabasqueño fue en su tesis de que la corrupción es el principal problema del país porque causa desigualdad, pobreza e inseguridad, por lo que, una vez más, prometió que acabará con este problema de raíz.
Adjudicó su ventaja en la encuestas de intención de voto al trabajo de “pedagogía política” para “concientizar” a cada vez más sectores de la sociedad, entre ellos “muchos ciudadanos de clase media”, de que hay “una mafia del poder” que controla las instituciones y domina el país con avaricia.
Consideró que esta conciencia es “la mayor aportación social y política” de Morena y señaló que es “fundamental” para la transformación que pretende encabezar, pues “no se puede cambiar lo que no se conoce”.
Asimismo, remarcó que su discurso antielitista ha permeado con fuerza entre los jóvenes, quienes –afirmó– reconocen que él es el candidato más viejo, pero que él representa “lo nuevo, la modernidad forjada desde abajo para todos”.
Reitera compromisos de campaña
Como lo hizo durante los 90 días de su campaña, el presidenciable reiteró los compromisos de su “Proyecto de Nación 2018-2024”, cuya implementación comenzaría a planear a partir del 2 de julio y hasta 1 de diciembre, día en que tomaría protesta.
Su gobierno –dijo— procurará un “auténtico estado de Derecho”, respetará la división de los poderes –Legislativo, Ejecutivo y Judicial— y los derechos humanos, además de frenar la persecución y espionaje de Estado, por lo que el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) cerrará sus puertas.
Eliminará la práctica del “fraude electoral” y solicitará al Congreso federal tipificar los delitos electorales como graves para que quienes los cometan puedan ser encarcelados durante el juicio.
Acabará con uso faccioso de presupuesto
Acabará con el uso faccioso del presupuesto público y promoverá un régimen austero, dónde él y los altos funcionarios verán reducidos considerablemente sus sueldos y privilegios.
Respecto al problema de la inseguridad y la violencia que afectan a casi todo el país, rechazó las políticas de los gobiernos anteriores, por el alto saldo de víctimas, y reiteró que pretende convocar a todos los actores –agraviados, autoridades, organizaciones civiles y especialistas– para analizar “todas las alternativas”.
Buscará nuevo acuerdo con EU
Por lo que se refiere a política exterior, aseveró que “México es un país libre y soberano que nunca será piñata de nadie” y se pronunció por buscar un acuerdo de cooperación y respeto con Estados Unidos.
En este sentido, indicó que, en su momento, propondrá al gobierno de Donald Trump y al de Canadá un tratado “amplio e integral”, que no sólo incluya comercio, sino también contemple “el desarrollo regional, la creación de empleos, el mejoramiento de los salarios, la seguridad fronteriza, entre otros temas”.
