A partir de enero de 2019, inicia un sistema de puntos para el “buen conductor” y terminan las sanciones por fotomultas en la Ciudad de México, que entre 2015 y 2017 generaron 183 millones de pesos para Autotraffic, empresa que también opera en Puebla.
De acuerdo con la jefa de gobierno electa de esa entidad, Claudia Sheinbaum Pardo, se transitará de una política punitiva a una de “cambio de conductas”, a través de los puntos y servicio comunitario, con miras a reducir el exceso de velocidad y los accidentes vehiculares.
En conferencia de prensa, explicó que a cada matrícula registrada en la capital se asignarán 10 puntos, de los cuales se irán descontando hasta cinco por infracción. En los primeros dos puntos habrá notificación y, a partir del tercero, se emitirá una sanción “cívica”.
De esta manera, “si llegan (los conductores) a cero puntos, deben hacer diez horas de servicio comunitario para poder verificar el automóvil”, acotó el próximo secretario de Movilidad, Andrés Lajous Loaeza.
El nuevo sistema implicará también el traslado de las cámaras y los radares de velocidad a zonas en los lugares con mayor incidencia de accidentes por tráfico vehicular.
Los funcionarios justificaron esta medida en que no se ha comprobado que las fotomultas reduzcan los accidentes de tráfico, por lo que estas sólo se han convertido en un “esquema de recaudación”.
En el caso de Puebla, vale mencionar que el gobierno estatal reportó una recaudación de 75 millones 953 mil 342 pesos, entre enero y septiembre de este 2018, por concepto de fotomultas.
Editado por Luis Alberto Palacios
