En su visita a Perú, el papa Francisco denunció este viernes la opresión que viven los indígenas de la Amazonía y su medio ambiente por parte de los intereses económicos, advirtió que nunca han estado tan amenazados como ahora.
El fuerte discurso fue expresado en la pequeña ciudad de Puerto Maldonado en el corazón de la selva amazónica, que no llega a los 75 mil habitantes.
Afirmó: “quienes no habitamos estas tierras necesitamos de su sabiduría y conocimiento para poder adentrarnos, sin destruir el tesoro que encierra esta región”.
El acto central de este viaje fue en el Coliseo Madre de Dios donde unos 4 mil representantes de los indígenas mostraron orgullosamente sus cantos, bailes y tradiciones.
Recordó también uno a uno los nombres de los diferentes pueblos originarios de la Amazonía y aseguró que había deseado mucho este encuentro.
Derrames de hidrocarburos
Cabe destacar que el discurso del pontífice fue un duro alegato contra la situación en la que se encuentran y aseguró que probablemente los pueblos originarios amazónicos nunca hayan estado tan amenazados en sus territorios como lo están ahora.
Citó como la fuerte presión de los intereses económicos dirigen su avidez sobre petróleo, gas, madera, oro, monocultivos agroindustriales, sin tener en cuenta al ser humano, en concreto a los habitantes de la Amazonía.
“Hemos de romper con el paradigma histórico que considera la Amazonía como una despensa inagotable de los Estados sin tener en cuenta a sus habitantes”, enfatizó.
El argentino habló también del sufrimiento que padecen los pueblos originarios por los derrames de hidrocarburos que amenazan la vida de sus familias y contaminan su medio natural y de la contaminación ambiental propiciada por la minería ilegal.
Después de su visita a Puerto Maldonado, el religioso argentino regresará a la capital para reunirse con el presidente Pedro Pablo Kuczynski.
Editado por Dario Navarro
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